Un Alfa con olor a quemado y un Omega con pésima personalidad, ambos son vecinos, y a su vez compañeros de clases.
Uno odia al otro y el sentimiento es mutuo, pero ambos están juntos para intentar salir de su situación, ser los desadaptados de la c...
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Jungkook había pasado la mayor parte de la noche viendo por su ventana/ balcón, no podía quitar su mirada de la habitación de Hoseok, solo para asegurarse de que aun se encontraba en su habitación.
Temía de que el chico pudiese cumplir sus amenazas, salir y ponerse en peligro.
Con eso de que había alguien en la zona que lo había visto en celo, el que no estuviesen sus papás en casa, su abuela o sus primas, hacía que todo apuntará a una muy mala dirección.
Para su buena suerte, o mala suerte, Hoseok se había quedado en su cama, llorando mientras se retorcía entre las sábanas. Parecía pasarla mal.
El chico se había quitado toda la ropa, seguramente por el intenso calor que sentía. Eso hacia más tortuoso para Jungkook el poder cuidarlo.
En especial porque ahora más que nunca podía ver, aunque sea de lejos y a través de pequeñas ranuras entre las cortinas, como el chico que conocía de toda la vida se acariciaba con fuerza, no podía verlo todo, incluso si Jungkook se movía en su propia habitación para intentar ver algo más, las cortinas de Hoseok no le permiten ver algo mas que su estómago desnudo, y su rostro.
Jungkook estaba sentado en su cama, viendo a Hoseok con mucha atención. No podía entender como el cuerpo de Hoseok había cambiado tanto con los años.
Solo podía ver una parte de su cuerpo, pero tenía curiosidad de ver cómo era el resto. Quería comprobar con sus propios ojos en que otros lugares Hoseok había cambiado.
Jungkook empezaba a marearse, sentía que no podía mantenerse conciente, y sin darse cuenta su mano izquierda había bajado hasta su pantalón, empezando a acariciar por encima de su pantalón su miembro duro.
Se sentia caliente, y a su vez vulnerable, como si fuese una mala broma, creía que si Hoseok hubiese sido mas insistente, habria logrado que Jungkook estuviese en su cama.
Habría sido terrible, Jungkook siendo prácticamente un consolador para ese Omega en celo que solo quería sentirse lleno, Jeon se habría tomado tan enserio ese papel, que habría hecho todo lo humanamente posible para satisfacer a Hoseok.
Incluso si eso significaba tratarlo suave, con dulzura o tratarlo como un juguete sexual. Solo bastaba que Hoseok le pidiera que hacer y Jungkook lo haría con gusto.
Odiaba a Hoseok.
Odiaba esa maldita necesidad de querer girar sobre su mundo.
Su mano izquierda tocaba con fuerza su miembro, su mano se deslizaba bien por el líquido preseminal que habia goteado desde su punta, su miembro estaba erecto, hasta las venas se marcaban a lo largo de su erección, se se sentía muy caliente y así vez adolorido.
Quería enterrar su verga en el trasero de Hoseok, quería dejar caer todo su peso sobre él, solo para hacerle saber que eso era lo que había provocado.
