[10] Plan [II/II]: Realidad

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      Sanji observó ansioso como todos se alejaban del barco. A su lado, Zoro observaba la misma escena con más cuidado.

      —¿Quieres comer algo? —Sanji estaba nervioso, no iba a negarlo. Esta podía ser su única oportunidad en mucho tiempo, y tenía miedo de echarla a perder.

      —No gracias. Iré a entrenar un rato. —dijo simplemente el peliverde, sin moverse de su sitio hasta que sus compañeros desaparecieron de la vista de ambos.

      Sanji se limitó a mirarlo, ¿acaso había arruinado los planes de Zoro de salir y despejarse un poco? La simple idea lo estresó. Si ese realmente era el caso, significaba que había comenzado con el pie izquierdo.

[ . . . ]

      Como si los dioses estuvieran contra el cocinero, le resultó casi imposible cruzarse con el espadachín: Si Sanji estaba en la cocina, entonces Zoro estaba entrenando. Y si Zoro iba a la cocina en busca de sake, entonces Sanji estaba buscándolo en su zona de entrenamiento.

      Para empeorar las cosas, cuando Sanji llamó al espadachín para comer, apenas cruzaron palabras.

      El peliverde se veía distante, miraba su plato durante unos minutos, fruncía el ceño, comía un bocado, y así repetidas veces. La única vez que rompió su extraño ritual fue para dar un comentario sarcástico, como los que siempre se decían entre ellos.

      —¿No te hubiera gustado estar con Nami, en lugar de conmigo? Digo, realmente te "emocionas" mucho cuando ella está cerca. —dijo con un tono burlón, pero sin estar realmente "presente" en la conversación.

      Sanji respiró hondo. Era su oportunidad, la única que se le había presentado en todo el día para tantear el terreno.

      —Estoy bien así. A decir verdad, estuve planteándome la idea de tener una relación realmente seria, y luego de pensarlo mucho, no creo que Nami sea la opción correcta. —Al ver el repentino interés y sorpresa de parte del peliverde, el cocinero no pudo evitar sentir algo de esperanza, abriéndose un poco más con el Alfa —. Comencé a tomar supresores para controlar mejor mí alta sensibilidad... Es algo raro, es como si todo fuera menos intenso, en todo el sentido de la palabra. Pero si quiero que me tomen en serio, necesito dejar de ser tan... "Intenso" con cualquiera que se me cruce.

      —Estoy realmente sorprendido. —respondió Zoro, con los ojos bien abiertos —. Te deseo suerte con tu búsqueda.

      —Gracias… ¿Vos tenés planeado formalizar una relación con alguien?

      Sanji notó como el cuerpo entero del Alfa se tensó, y nuevamente adoptó una actitud distante.

      —Soy consiente de que la única persona con la que quiero ese tipo de compromiso, ni siquiera es capaz de considerar la idea.

      Esa frase fue más que suficiente para que las esperanzas de Sanji se hicieran añicos. Ninguno de los dos se volvió a dirigir la palabra en lo que restó del día.

[ . . . ]

      Cuando los demás volvieron, Sanji pudo ver por un pequeño instante como los ojos de Zoro se iluminaron, luego de que Luffy subiera al barco usando sus brazos como trampolines.

      Fue entonces cuando Sanji se dio cuenta.

      «Ni yo puedo imaginarlo pensando en algo que no sea el One Piece»

      Pensó, justo antes de que Nami y Robin se acercaran a él para preguntarle cómo le había ido.

      —No pude decir nada... —se limitó a decir, solo para irse al sentir un nudo en la garganta.

Una tripulación complicadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora