Conejito

uno

Wangji es el segundo príncipe de la familia Lan, sus padres ya han colocado a su hermano mayor con la familia Nie, Xichen fue entregado en matrimonio con el heredero del imperio más rico del pais, actualmente está preñado de su esposo el lider de la familia Nie Mingjue.

Wangji esta preocupado por el, asi que regularmente reza en su templo invocando su fuerza espiritual, para enviar buenas vibras a su qierido hermano, convertido en un lindo conejo blanco de ojos dorados este pide a su dios, que ayude a Xichen a soportar hasta que su bebe nazca.

Los Lan tienen unos de los pocos espíritus ancestrales que han pasado de generación en generación en algunas de las familias de China, lamentablemente su hermano no tiene está capacidad.

A pesar de ser un doncel, Xichen no tiene la capacidad de invocar al conejo espiritual, que su familia necesita para revivir su antigua gloria, una voz nada agradable interrumpió su meditación, con premura corrió dentro de su cubículo personal para tomar sus túnicas, nadie que no fuera su familia o su esposo podría ver la transformación de conejo a humano.

Wangji si nació con el don, es un cambia formas pero no cualquier especie, es un cambia formas espiritual, el lindo conejo Wangji tiene la capacidad de sanar a cualquier ser vivo siempre y cuando la vida de ese ser esté escrito en el Libro de la vida como alguien que aún debe permanecer en este mundo.

Ya que de lo contrario si el conejo espiritual salva a alguien que su vida ya estaba destinada a acabar, el espíritu del conejo tomaría el lugar muriendo en el acto, es por ello que ahora la familia Lan se encuentra en esa penosa situación, ahora mismo solo tienen a Wangji como heredero de esa virtud por lo que muchos hombres codiciosos han tratado de tomarlo para ellos, sus padres mantienen al joven dentro de su territorio con la finalidad de mantenerlo a salvó.

Ya listo salio de su habitación para reprender al criado que se atrevió a interrumpir su meditación matutina, el jove Su She pidió disculpas por entrar de esa manera tan intempestiva, pero le aseguro que era por que había sido enviado por sus padres para ayudarlo a escapar, debían irse de inmediato pues los salvajes Wei habían llegado para tomarlo a el como pagó por no destruir su hogar.

DEBEMOS IRNOS SU SANTIDAD, grito el joven tratando de tomar el brazo del joven Lan, pero este lo paro en seco, NO!! aclaro Wangji corriendo rumbo al estudio de su padre seguramente ahi estaban los invitados, no sabía que haría para salvar a su familia de ser arrazada pero una cosa era segura , no se quedaría de manos cruzadas huyendo del problema para salvar su pellejo, no sin antes tratar de sacar a sus amados padres de este terrible problema.

Los Wei eran una familia de bárbaros, salvajes zorros astutos, engañaban secuestraban, conquistaban territorios a diestra y siniestra sin ningún tipo de remordimiento, su lider era un joven Zorro negro de nombre Wei Ying, el único sobreviviente del clan de los Zorros después de que su familia fuera casi extinta por los Wen.

Estas dos familias fueron una hace muchos años, lamentablemente cuando la hija de Wen Riuyi se fugó con uno de sus guardias personales para vivir lejos del sometimiento al que la tenían en su antiguo hogar la lucha inició, duró muchos años en conflicto algunas de las demás familias se metieron a querer ayudar de ambos lados dejando casi 20 años de guerra encarnizada.

Al final los Wen sobrevivieron, los Wei desaparecieron o al menos eso habían pensado pues hace unos años atrás un zorro Negro de porte imponente, poder maligno y con sed de venganza se hizo presente, destruyo a los Wen dejando solo como sus aliados a los sobrinos de Wen Rouhan, los Jóvenes Wen Quing y Wen Ning con unos cuantos miembros médicos de la familia secundaria, desde ahí muchos hombres mujeres y huérfanos se unieron al nuevo clan que el hombre nombro como Yiling Wei.

Con esos pensamientos llenos de insertidumbre el Lan llegó hasta la habitación que su padre usaba para asuntos delicados, ahí vio a ese imponente hombre de cabello negro, ojos completamente rojos y una sonrisa diabólica, si Wei Ying tenía a su padre casi sin aire pues lo tenía sujeto del cuello, su madre suplicaba que lo soltara y su tío estaba desmayado en el piso.

IRE CONTIGO SI ES LO QUE QUIERES, hablo fuerte y claro el Lan, solo debes prometer que todos los que están ligados a mi por familia, matrimonio o aprecio no serán tocados de ninguna manera, YO SERE LO QUE QUIERAS, PERO POR FAVOR DEJA A MI FAMILIA EN PAZ, concluyó el Lan, acercandose hasta donde el joven sujetaba a su padre quien lloraba de dolor al ver que su dulce conejito no se fue como el había ordenado para salvarlos a todos.

Ahora su corazón dolía, como podría vivir sabiendo que tantas atrocidades soportaría su dulce conejito en manos de ese zorro salvaje, pero cuando iba a empezar a protestar para hacer entender a su presioso hijo, el Wei dijo algo que lo dejó más callado que un muerto en la morgue.

MARCA TUS PALABRAS CARIÑO, SOLO QUIERO QUE TU SEAS MIO, QUE VIVAS PARA MI Y QUE NUNCA ME TRAICIONES SI TU HACES ESO, TE PROMETO .....

QUE PRIMERO ME ARRANCO EL PELLEJO ANTES QUE LASTIMAR O PERMITIR QUE ALGUIEN TE LASTIME A TI O TUS SERES QUERIDOS..

Ese día Lan Wangji fue llevado de su hogar en brazos de ese Zorro salvaje, indisciplinado y hambriento, no sabía lo que le esperaba en su nuevo hogar, no sabía si el hombre cumpliría su palabra, pero no le quedaba de otra, su familia ahora no tenía la capacidad para defenderse en caso de que los Yiling Wei decidieran atarcalos.

Esperaba que las palabras que sonaron tan serias, llenas de verdad y valor, no fueran frases vacías de todas maneras, cuando iban saliendo de su territorio oyó que uno de los que seguían al Wei de muy cerca le dijo al hombre Zorro, mi señor dejamos todo tal como lo ordenaste en cuanto la boda este lista los chicos se irán del territorio para dejar que sus habitantes regresen a su vida normal, solo vigilaremos desde las sombras para que nadie más tome ventaja de ellos.

Eso tranquilizo a Wangji, con su corazoncito latiendo muy rápido, sus ojos cansados de tanto llorar al verse lejos de su hogar y la insertidumbre de lo que le espera allá en Yiling, calló en los brazos de un extraño sueño tranquilo, su respiración se hizo acompasada, solo se oían unos lindos silviditos estos le decían a su portador que el bebé conejo ya estaba soñando

Esta bien que descanses mi dulce amor, por qué una ves que lleguemos a nuestro hogar no te dejaré dormir hasta que este lindo cuerpo sea marcado, tomado y saciado por mi hambre de ti, el Wei se coloco el estuche donde iba a transportar a su lindo conejito para después tomar su forma animal.

Debía correr el resto del camino de regreso a su casa, había esperado casi 15 años para devolver lo que ese lindo Lan hizo por el cuando nadie más quiso ayudarlo, nadie lo lastimaria ahora, el sería su fina navaja protectora, no importa a quien tenga que enfrentarse para mantenerlo a salvó.