01. - el comienzo

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Dos chico se encontraban corriendo por la estación de tren, tratando de evitar chocar con la gente para no llegar tarde a su tren, detrás de ellos iba otro chico, de cabello negro y con una túnica igual que la de ellos, totalmente ajeno a ambos.

Ambos con su carrito lograron atravesar la barrera mágica, lograron ver a toda la gente en aquella estación, ambos sonrieron emocionados, dos adultos que ambos reconocieron ya estaban allí.

Ambos se acercaron a ellos, un hombre de apariencia robusta los empezó a regañar mientras que una mujer vestida como bruja y de cabello negro los miraba seriamente.

X: ¡Alexis, Juan! ¿¡donde estaban!? ¡El tren está por salir! -ambos chicos agacharon sus cabezas-

J: lo siento mucho padre -dijo en tono nervioso-

X: eso ahora no importa, ya, suban que el tren está por irse -ambos asintieron y se despidieron de ambos adultos-

Ambos subieron al tren y buscaron un vagón y se asomaron hacia la ventana junto a otro pelinegro.

X: ¡Drako, Juanito, buen viaje y cuídense, por favor, y tu también Alex! -los tres saludaron mientras sonreían y el tren empezaba a avanzar-

J: nosotros iremos a buscar otro vagón -dijo el castaño una vez se alejaron de la ventana-

D: ¿seguros? Aquí hay espacio.

J: queremos dejarte con tu amigos en paz, además, sabes que nos gusta estar solos -el pelinegro rio levemente-

Ambos salieron del lugar y empezaron a buscar algún vagón vacío, para su suerte, había uno.

Ambos entraron y se acomodaron en los asientos.

No pasaron ni cinco minutos cuando dos chicos entraron apresuradamente al vagón, asustando a ambos chicos.

Un chico castaño junto a uno pelinegro cerraron la persiana que había en la ventana de la puerta.

J: ¿que verga? -dijo confundido, ambos chicos se giraron y pudieron notar que el pelinegro llevaba una túnica como la de ellos, mientras que el castaño llevaba una con el logo de gryffindor-

X: ah.. Lo sentimos -se disculpó mientras sonreía nerviosamente-

Q: ¿y estos que? -le dijo al oído al castaño quien se encogió de hombros-

J: ¿podemos preguntar por que entraron así? -preguntó algo confundido, su duda fue resuelta cuando se escucharon algunos gritos y los pasos de personas corriendo-

X: creo que eso lo explica -dijo con una sonrisa nerviosa- ¿podemos quedarnos aquí?

Q: el tiempo que quieran -dijo de inmediato, su primo lo miró extrañado, ambos chicos se dirigieron al asiento disponible, en frente de los menores, un silencio los invadió-

J: y... ¿Como se llaman? -ambos chicos se miraron y luego miraron a ambos chicos serios-

X: ¿no saben quienes somos? -dijo seriamente, ambos chicos negaron levemente, sorprendiendo a ambos chicos-

S: bueno, yo soy Iván, pueden decirme Spreen -al pelinegro extrañamente se le hacía demasiado familiar ese nombre-

L: y yo soy Borja, pero pueden decirme Luzu -dijo aún con un tono serio, pero más blando-

J: un gusto, yo soy Juan -dijo con una sonrisa- y el es Alexis, mi primo.

Q: un gusto, pueden decirme Quackity -dijo alegremente, haciendo reír al castaño mayor-

Los cuatro estuvieron hablando casi todo el viaje, hasta que en un momento, el de gorro se quedó dormido, el castaño empezó a quejarse, pues tenía al pelinegro sobre su hombro y ya le empezaba a doler.

L: ¿quieres que intercambiemos? -el castaño lo miró-

J: por favor -el castaño mayor se levantó y rápidamente cambiaron de lugar, el de lentes se sentó junto al otro pelinegro-

Los tres estuvieron charlando un rato más, hasta que el castaño también se durmió, haciendo que los otros dos se empezarán a burlar, ambos se quedaron en silencio casi de inmediato.

El castaño tomó se mochila y sacó una pequeña cámara y les sacó una foto.

J: de recuerdo -dijo agitando la foto para poder revelarla-

S: ¿puedo tener una? -preguntó algo tímido, el castaño lo miró y sonrió-

J: claro -volvió a sacar otra foto y la reveló para luego entregársela al pelinegro, quien empezó a burlarse-

Luego de casi media hora después llegaron por fin, ambos despertaron a ambos chicos que estaban dormidos.

Los cuartos bajaron del tren y se acercaron a un hombre más grande que ellos.

Q: ¡Merlon! -dijo con entusiasmo el pelinegro-

M: ¿como estás niño? -dijo acariciando la cabeza del pelinegro-

Q: muy bien ¿como estás tu abuelo?

M: pues muy bien, mejor ahora que veo a mi nieto favorito -dijo para luego ver a dos chicos completamente confundidos-

S: ¿como que abuelo? -dijo confundido, el pelinegro contrario lo miró sonriente-

Q: si, Merlon es mi abuelo ¿acaso lo conoces? -el pelinegro estaba por contestar, pero vio la cara seria del hombre, por lo que simplemente se calló-

S: no, no lo conozco -dijo desviando la mirada, el castaño miró seriamente al de gorro-

Los cuatro se fueron hacia el grupo de primer año, al llegar, el castaño mayor se apartó de ellos y se fue a su respectivo grupo.

Los tres se dirigieron a una especie de carruaje y subieron, junto a otro chico, que al parecer, se había atrasado, era un chico también de cabello negro y ojos azules con una línea en si rostro.

X: lo lamento pero ¿puedo subirme con ustedes? -preguntó con nerviosismo, los tres asintieron y aquel pelinegro se subió, agradeciéndoles-

Q: ¿como te llamas? -preguntó el de gorro-

A: soy Alejandro, pero pueden decirme Alexby o Lely -dijo sonriente-

Q: pues un gusto Alex, yo soy Alexis pero puedes decirme Quackity, el es mi primo Juan y ese es Spreen -el pelinegro lo miró mal por haberle dicho "ese"-

A: pues un gusto a todos -dijo sonriente-

A: pues un gusto a todos -dijo sonriente-

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Karmaland, escuela de magia y hechicería // Luckity - SpruanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora