04. - Rubí

77 9 2
                                    

El pelinegro se acercó más al castaño con un rostro serio, no tenía ganas de tocar ese tema, pero su hermana le había dado permiso y sentía que podía decirle todo lo que quisiera al castaño.

S: cuando todo pasó yo tenía sólo ocho años, Rubí ya estaba en su primer año de escuela, no se mucho con respecto al tema -suspiro pesadamente-

J: no tienes porqué contarme si no te sientes cómodo -dijo con nerviosismo, sentía que estaba forzando al pelinegro a contarle algo que no quería-

Ru: si no le cuentas lo haré yo, Iván -dijo bajando del ventanal, aterrizó junto a ellos-

J: ¿por que insistes en contarme? -preguntó serio y a la vez con curiosidad-

Ru: porque quiero que me ayudes -se sentó y apoyo sus manos sobre las del castaño, este sintió una extraña sensación en ellas, ambos chicos la miraron con curiosidad-

»»——⍟——««

Ambos chicos se encontraban en estado de shock, Juan por saber cómo termino así y Spreen igual, nunca le habían contado el porqué su hermana había muerto.

Flashback

Ru: cuando empecé primer año estaba muy emocionada, en ese entonces tenía un compañero, desde que lo conocí supe que era un chico sumamente molesto, en ese momento usaba lentes y era toda una nerd, supongo que eso llamó su atención y empezó a hacerme bullying, a tal punto de que empecé a hacer algo de lo que ahora no estoy para nada orgullosa -apenas se notaba gracias a su cuerpo casi transparente, pero se podían divisar varias cicatrices-

Ru: creo que el bullying no era sólo por eso, en ese tiempo nuestros padres eran profesores en la escuela -el pelinegro la miro serio, la femenina entendió a la perfección esa mirada, tenía que cuidar sus palabras- supongo que pensó que me iban a favorecer y eso le molestó, cuando se enteró que eran mis padres el acoso aumentó, tanto que incluso empezó a esparcir rumores sobre mi.

Ru: el acoso ya no venía de el, sinó que de varios alumnos, incluso de cursos superiores, un día, unas compañeras entraron a este mismo baño, yo me encontraba en aquel cubículo -señalo al último cubículo, el cual estaba escrito- ellas me habían seguido, supongo que me escucharon llorar y entraron, me golpearon, tanto que termine en el hospital -Spreen se acordaba de eso, fue la primera de tantas veces que había visto a su hermana así-

Ru: fue así hasta casi medio año, pensé que el abuso había terminado pero no fue así, es más, había empeorado, las pesadillas eran constantes, tanto que apenas podía dormir, me recetaron pastillas para dormir.

Ru: un día, mi compañero se colo en el baño de niñas, yo estaba en el mismo cubículo, me tiro una bolsa con basura, luego entró y lo último que me acuerdo de ese día fue que sacó su varita, luego volví a despertar en el hospital.

Ru: eso fue la gota que derramó el vaso, una noche, me había vuelto a despertar de una pesadilla. Los comentarios y todo lo que me hicieron llegó a mi mente, empecé a llorar tanto que mi mente se nubló ¿que hice mal? ¿Merece la pena vivir? ¿Soy un error? ¿Merezco vivir? Eran las preguntas que rondaban en mi mente en ese momento.

Ru: me levanté de la cama y me dirigí hacia la ventana que estaba a un lado, suspire tratando de calmarme para no despertar a ninguna de mis compañeras de cuarto, por más que tratara no podía, mire mi frasco con las pastillas para dormir y una idea pasó por mi mente, rápidamente me negué, pero cuando menos me di cuenta mi cuerpo ya me estaba dirigiendo hacia el baño de niñas con las pastillas.

Ru: por un momento lo dudé, la única razón por la vivía era por ti -miro a su hermano, quien estaba a punto de llorar pero no se notaba por sus lentes- pero el impulso pudo conmigo y me tome al rededor de siete pastillas cuando el máximo era tres.

Ru: era de madrugada, el baño ya había sido abandonado, nadie pasaba por aquí aparte de mi y los pendejos que me hicieron hacer esto. No era raro que me saltara algunas clases, pero cuando desaparecí por casi dos días, el idiota que me molestaba se atrevió a entrar al baño, se que me vió, yo ya me había convertido en un fantasma, me había escondido en una esquina cuando lo escuche venir, se quedó viendo mi cuerpo en el suelo, no sabía cómo reaccionar hasta que salió corriendo.

Ru: horas después de eso escuche como personas venían corriendo, yo estaba viendo mi cuerpo, cuando los escuche me metí en un ducto para que no me vieran, asome un poco la cabeza, vi a mis padres en shock, ahí caí en cuenta de lo que había hecho, me sentí mal por ellos y me arrepentí de lo hice, luego escuche gritos, sabía que eran de ellos, también escuche como lloraban, quería salir y que vieran que seguía ahí, pero no podía, la culpa podía conmigo.

Ru: nuestros padres estaban devastados, por lo que se, habían renunciado, habían tratado de denunciar al colegio por lo que pasó, pero se defendieron diciendo que "no sabían lo que estaba pasando", claro, el Ministerio tomó su palabra y ganaron el juicio. Yo se que estaban al tanto de lo que pasaba pero no les importaba -miro a su hermano quien ya estaba llorando sin parar- lamento haberte dejado así hermanito -expresó, si pudiera, estaría llorando junto a él, pero no podía, el simple hecho de ser un fantasma se lo impedía, podía sentir emociones pero no podía llorar-

Fin flashback

Ambos chicos seguían en estado de shock, lo que la chica les había dicho era difícil de procesar, más que nada para el pelinegro, sus padres nunca se habían atrevido a contarle el porqué su hermana murió, y ahora entendía porqué, debió haber sido muy duro para ellos haber perdido a otro hijo.

El pelinegro se levantó sin dejar de llorar y se fue, el castaño tardo en percatarse de eso, se levantó rápidamente para ir detrás de él.

J: ¡Spreen! -lo llamó y empezó a correr detrás de el, antes de salir se giro y le habló a la chica- lamento lo que pasaste Rubí, en otro momento volveré para hablar ¿si? -la niña sonrió dándole a entender que estaba bien, el castaño se dio la vuelta y empezó a correr para poder alcanzar al pelinegro-

J: ¡Spreen! -lo llamó y empezó a correr detrás de el, antes de salir se giro y le habló a la chica- lamento lo que pasaste Rubí, en otro momento volveré para hablar ¿si? -la niña sonrió dándole a entender que estaba bien, el castaño se dio la vuel...

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Karmaland, escuela de magia y hechicería // Luckity - SpruanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora