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Amaría poder decir que me desperté gracias a los suaves sonidos provenientes de las aves,o los tibios rayos de sol entrando por mi ventana,incluso con la voz de mi madre ordenando desde el pasillo que me levante para ir a estudiar. Pero lamentablemente lo que me despertó no fue nada de eso,sino el molesto sonido de la alarma programada de mi teléfono,aquella que parece la de un automóvil por lo fuerte que suena,pero en mi defensa,tengo el sueño pesado.
Abro los ojos y perezosamente estiro mi brazo para poder apagarla.

Quedo tendida en mi cama unos minutos más,tratando  que el alma me vuelva al cuerpo y pueda levantarme. Finalmente lo hago y me dirijo al baño de mi habitación para hacer mis necesidades y darme una ducha fría que termina por despertarme completamente.

Hoy es un día con un clima bastante agradable,no hace ni frío,ni calor, así que opto por vestirme con una falda de mezclilla rosa,muy bonita ,una blusa blanca un poco corta y unos zapatos de tacón también blancos.

Una vez ya vestida, agarro mi teléfono y pongo música, Taylor Swift.

Lo llevo conmigo al baño,en donde seco mi cabello rubio y le hago unas ondas ligeras muy bonitas,lo dejo suelto, lo cuido mucho, así que queda muy bien.

Me pongo un poco de sombra rosa en los párpados,hago una fina línea por encima de las pestañas con delineador y pongo rímel en ellas ya arqueadas, me tomo unos segundos para apreciar si está todo correcto y lo confirmo,el maquillaje resalta aún más mis ojos verdes. Aplico un poco de rubor y también iluminador. Finalmente un poco de gloss y listo.

Me pongo unos aretes,un collar y mis anillos de siempre.

Vuelvo a mi cuarto para tomar mi bolso y fijarme si todo estaba en orden. Cuando ya estaba lista me miré por última vez en el espejo y salí.

Le pongo llave a mi departamento y bajo por el elevador. Vivo sola hace dos años,cuando decidí dejar mi pueblo natal y mudarme a la ciudad para entrar en la universidad que deseaba.

Camino por las hermosas calles de Londres mientras escucho música por mis audífonos.

Observo una de mis cafeterías favoritas y sonrío antes de entrar.
Hay pocas personas dentro,no tengo que esperar mucho para hacer mi pedido.

—Buenos días—. Saludo con una sonrisa.

—¡Buenos días Char!¿Que deseas ordenar? —me saluda Erick, uno de los trabajadores del lugar,es buen amigo mío.

—Un café con leche,con crema por favor.

—Mucho hielo y mucha crema batida,¿Verdad?—pregunta divertido.

Asiento rápidamente, soltando una risita. Todas la mañanas paso por aquí a comprar el mismo café de siempre.

Una vez que mi café ya está listo,me despido de Erick y salgo de la cafetería.

Amo esta ciudad,haberme mudado aquí para perseguir mis sueños,fue la mejor decisión que tomé en mi vida.

Desde pequeña he sabido de mi amor por los libros y todo lo relacionado con ellos, lamentablemente en mi pueblo estudiar literatura no era una opción, así que en vez de estudiar otra carrera, decidí ir a otro lugar donde si pudiera estudiar lo que quería,es así como terminé en Londres.

Una vez que llego a la universidad, me encuentro con mi mejor amiga,Marian.
La conocí el primer día de clases,es mi compañera. Nos llevamos bien al instante,es una persona sumamente dulce y divertida,en dos años hizo que sienta que la conozco de toda una vida. La amo muchísimo.

—Cariño,me hubieses avisado y pasaba a buscarte con el auto—. Dice mientras paso mi brazo por el suyo para comenzar a caminar.

—Sabes lo mucho que me gusta venir caminando—. Digo observando mi reloj,son las 7:40 am,mis clases no comienzan hasta las 8:00.

Sunshine || Wilhemina VenableDonde viven las historias. Descúbrelo ahora