Capítulo cinco

56 6 1
                                    

Tomaste su mejilla e hiciste que su cara quedara más cerca de la tuya, por un momento respiraron el aliento del otro. Uniste sus labios, Han era tímido y dejaba que tú lo guiaras, entonces tomaste el control.

Eras impaciente, y siempre ibas directo al grano. Subiste a horcajadas en Jisung, esperabas que él te tocara pero no lo hizo, sus manos descansaban a los costados de sus piernas, inmóviles. Dejaste de besarlo y sonreíste.

-Lo siento, creo que me emocioné - le dijiste.

-No -protestó, tú ibas a bajar de sus piernas pero sus manos te tomaron de la cintura - Si tú quieres esto, yo lo deseo con todas mis fuerzas Daph...

Una sonrisa adornó tu rostro, Han te llenaba de ternura y eso te hace atacar su boca de nuevo. Él trata de seguirte el ritmo pero sigue sin tocarte.

-Haz lo que yo te diga ¿okay? Todo está bien - lo tranquilizaste al notar su rostro ardiente.

Comenzaste a guiar sus manos por tus muslos llegando a tu trasero, una vez que estuvieron ahí, lo abrazaste por el cuello y continuaste besándolo. Agradeciste a Dios que Jisung te acariciara y apretara sin tener que pedírselo.

Cuando menos lo esperaste, ambos se encontraban sin ropa en la parte superior del cuerpo; tenías a Hannie sostenido por la nuca, pegando su rostro a tus pechos. Esta era la primera vez que habías tomado un papel dominante por completo, así que pensaste en hablar un poco:

-Ah, mi Sungie... -gemiste levemente- ¿te gusta cómo mami te da de comer? - hiciste tu mayor esfuerzo por no reír preguntándote cómo los hombres decían esas cosas sin esfuerzo.

-Sí, mami, ¿lo estoy haciendo bien? - escuchaste su voz jadeante y todo tu cuerpo se erizó.

La luz del televisor seguía siendo su única fuente de iluminación, pero podías ver los ojos del menor observándote desde un ángulo inferior, sus redondos orbes avellana tenían un increíble poder en ti. Querías tenerlo dentro de ti en ese momento.

Le pediste que aguardara un momento y fuiste en topless hasta tu habitación, trayendo contigo un preservativo cuando regresaste. Pudiste ver cómo los ojos de tu Jisung se abrieron más de lo normal y tapó su rostro con sus antebrazos intentando ocultar su sonrisa nerviosa.

-Déjame primero probarte un poco antes de ponerte esta cosa -dijiste arrodillándote frente a él y sacando su miembro sin muchos preámbulos.

Hannie gimió cuando sintió tu mano tocarlo, al parecer era bastante sensible. Igual que con Changbin, no habías imaginado que aquel chico que se burló de ti por reverenciarte frente a él estaría llamándote mami y gimiendo para ti, cubriendo su rostro de vergüenza mientras le hacías una delicada felación.

Jisung solo acariciaba tu cabello a la par de sus gemidos; tú hiciste el trabajo lo más delicado y suave posible, pero el de mejillas rojas y grandes te pidió parar.

-Es sólo que... no creo aguantar lo suficiente... - aclaró al ver tu cara de confusión.

-¿Quieres que paremos por completo o solo quieres...? - sonreíste con malicia, dándole a entender la acción sexual.

-Si tú quieres - tartamudeó Ji con vergüenza.

Sin pensarlo más tomaste el preservativo y le ayudaste a ponérselo; te aseguraste una vez más que Jisung estuviera cómodo antes de subir de nuevo a horcajadas en sus piernas y léntamente te dejaste caer introduciendo su longitud en tu interior.

Ambos gimieron de gusto y te mantuviste inmóvil un momento.

-Voy a moverme ya, ¿okay? - dijiste como si fueras tú quien estuviera entrando en él, trataste de no reír.

Ser dominante estaba fuera de tu experiencia, pero nunca era tarde para aprender; además, el chico que ahora estaba dentro de ti no parecía extrañado de que fueras tú quien lo guiara.

Su miembro era lo suficientemente grande como para hacerte sentir escalofríos a medida que subías y bajabas en él. Han no se abstenía de gemir, de decir tu nombre falso viéndote con ojos de cachorro ni de apretar tus glúteos con sus manos a medida que su cuerpo también tenía oleadas de placer apretando los párpados.

-Daph, creo que voy a... - te avisó entre jadeos.

-¿Sí bebé? No te contengas, dámelo todo - le respondiste pegando tu frente a la suya.

La boca de Ji buscó la tuya y lo recibiste con gusto, ni siquiera sus labios unidos podían silenciar los gemidos de ambos. De pronto los brazos de Han rodean tu cintura con fuerza, casi obligándote a moverte más rápido, haciéndote saber que estaba por terminar.

Tu propio orgasmo llegó cuando sentiste al menor estremecerse debajo de ti, el abrazo de Jisung duró con la misma intensidad durante unos minutos más luego de que ambos terminaron.

Ese día Hannie durmió en tu casa, y fue el único que lo hizo. Te sentías cálida y cómoda entre sus brazos, pero tu mente se partía en dos debido al recuerdo de Changbin y sus continuos encuentros sexuales.

Echaste un vistazo al reloj, la madrugada estaba en su punto, trataste de dormir y de convencerte a ti misma de que podrías manejarlo. No sabías lo que te esperaba.

Técnica de Judo₊₁₈《3racha》 || Bang Chan, Changbin, Han x Femreaderᴱⁿ ᵉᵐⁱˢⁱᵒⁿDonde viven las historias. Descúbrelo ahora