Dulce Bola De Pelos [Sonic Prime] [Sonine]

15: Before The Speed (Parte 1)

El capítulo 14 está casí hecho pero tengo un bloqueo mental, además de otros asuntos personales.

Así que para que no deban esperar más de un mes o hasta que mi inspiración regrese, publicaré el capítulo 15 primero.

Al caer la noche, y tras esperar que todos se durmieran, Nine abrió los ojos mientras se incorporaba, dispuesto a intentar llevar a cabo su plan.
Sigilosamente, se las arreglo para escapar de la cuna usando sus colas, las cuales tenían la suficiente fuerza para elevarlo fuera de la cuna, aunque con un aterrizaje forzoso al suelo de por medio.

Tras recuperarse un poco del golpe, Nine se apresuró a acercarse a la cama donde el erizo yacía profundamente dormido. Lo más sensato hubiera sido intentar subir a la misma usando las sábanas y una vez arriba escapar por la ventana abierta, no obstante, el zorro bebé descartó está opción debido a que no quería arriesgarse a que estas se cayeran de la cama.

Por lo que la única opción era usar al propio Sonic para trepar.

--- No dejaré que vuelvas a traicionarme... Regresaré al Nefasto y encontré la forma de regresar a la normalidad por mi cuenta ---. "Decía" el pequeño zorro mientras intentaba trepar al erizo sujetándose de sus púas para mayor estabilidad.

Sin embargo, más temprano que tarde, Nine se arrepentiría de no haber elegido usar las sábanas.

Debido a los constantes movimientos de las manos de Nine, las púas de Sonic comenzaron a emitir leves destellos azules de corriente eléctrica, los cuales se volvían más notorios e inestables conforme el zorro bebé las frotaba.

No paso mucho para que este liberará, inconscientemente, una potente descarga de energía sobre el contrario. No lo suficientemente fuerte como para producirle un daño permanente pero si como para noquearlo y dejarlo medio tieso en el suelo con los pelos erizados.

[...]

Lentamente, el pequeño zorro comenzó a recuperar la conciencia, su cabeza le dolía debido a lo repentino de esa descarga pero, sorprendentemente, el resto de su cuerpo no dolía.

--- Que estúpido eres Nine... ¡¿Cómo pudiste olvidar eso?! ---. Se maldijo a sí mismo.

Sin embargo, su enojó se transforma en asombro apenas percatarse de que ya no se encontraba en el cuarto del erizo, mucho menos en el taller de Tails. Al parecer se encontraba en las afueras de Green Hill, en una zona con varias cavernas y, lo que parecía ser la entrada a una especie de templo o santuario hecho de piedra grisácea y suelo hecho de ladrillos morados.

--- ¿Qué...? ---. Nine observaba el sitio con una mezcla de asombro, curiosidad e intriga. --- ¿Qué lugar es este? ---. Se preguntaba mientras intentaba ponerse en pie para explorar, confiando nuevamente que seguía en su cuerpo de bebé al no poder mantener el equilibrio, cayendo de trasero sobre sus colas. --- Ngh~... Maldición... ---. Suspiro frustrado.

No obstante, las orejas del pequeño se levantaron al escuchar dos voces acercándose a su posición.

--- Génesis, ¿estás segura de que sabes a donde vamos? ---. Cuestionó una voz masculina.