Epígrafe

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"Un hilo rojo invisible conecta aquellos
que están destinados a encontrarse
sin importar el tiempo, lugar o circunstancias.
El hilo se puede estirar, contraer o enredar
pero nunca se romperá".



"Ella comienza a caminar rápido, evitando así que me acerque más a ella.

—¡Me caes pésimo, Aser Dylan!

—¡Perfecto, McKenzie Elder!, ¡Ni siquiera intentaba caerte bien!

—Eres un odioso —escupe, y siento como esas palabras se clavan poco a poco en mi pecho.

—Al menos sigo estando en tu corazón —me limito a responder, encogiéndome de hombros, como si no me importara, sabiendo en realidad que me está matando poco a poco el amor que le tengo a esa mujer.

Ella guarda silencio.

—¿Quieres que me vaya de nuevo? —pensar eso me destruye a pedazos, pero ella no tiene ni idea de cuánto.

—Quédate —responde casi al instante, con los ojos vidriosos.

—Siempre me dices que mi presencia te resulta desagradable desde que volví...

—Es mucho más desagradable cuando no estás aquí".

La Paz de Su SonrisaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora