27.

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n.a: Recomiendo escuchar con Give me love de Ed Sheeran.

n.a2: Dediado a Dakoneyx , MG_potter69 y @rubiuhftmahe

Abrí los ojos y me encontré con que estaba en mi habitación de Noruega, y lo que más me asusto fue ver un yo de diecisiete años frente a la computadora.

Me coloqué a su lado, y vi que estaba en el juego en que conocí a Emma y para colmo, hablaba con ella y sonreía como idiota. Qué buenos tiempos.

Vi la pantalla y leí parte de la conversación. En un momento, ella dijo algo como:"tengo que contarte algo". Yo le dije que qué cosa y después me respondió que nada, que no importaba. Recuerdo que en ese momento tenía miedo a los dentistas, la oscuridad, las chicas bonitas e iniciar una conversación. Y ella me los quitó todos y cada uno de ellos.

Hablábamos de banalidades, cosas tontas que no influirían en nuestro futuro, pero en el fondo, ya hablar con ella me decía que terminaría herido, y no me importó. No me importó en lo más mínimo, porque si bien, supe bastante tarde que estaba enferma ella fue quien me hizo una mejor persona, fue quien me hizo amar la vida y cada simple detalle que ella me entregaba. Me hizo saber que si tú quieres, tú puedes. Y que los soñadores, por más que los demás quieran, no pueden ser domados.

Di vueltas por la casa, vi a mi madre con el padrino, fotografías en la pared y varios objetos que le daban un toque hogareño. Salí al patio delantero, y como siempre (o al menos las veces que iba), había nieve por casi todos lados. Miré por el rabillo del ojo y vi a Emma.

Me volteé completamente y la vi con los pies descalzos, el cabello negro un tanto desordenado, sus ojos azules con una mirada tan fría que me asustó y un vestido blanco hasta un poco más arriba de la rodilla. Corrí hacia ella y quise tomar su mano para llevarla dentro y que se abrigara. Apenas nuestras manos se rozaron, ella golpeó la mía, haciendo que la alejara confundido.

-Emma...Soy yo-busqué en su mirada algo bueno, pero lo único que vi fue dolor- vamos a casa, juntos.

Volví a intentar tomar su mano, y de nuevo lo golpeó, dejándola con un tono rojizo.

-¿qué pasa?-se me cortó la voz.

Iba a llorar.

-Emma, por favor, soy yo, Rubén.

Seguía quieta con la mirada fría. Como muerta.

No aguanté más y rompí en un llanto desgarrador mientras mis rodillas dejaban de funcionar y caía en la fría y blanca nieve. Volví a mirarla a los ojos, a esos ojos que me hicieron volver tantas veces.

Ahora no eran fríos, me miraban con pena. Y ahí fue cuando me di cuenta de muchas cosas.

La expresión en su cara cambió a horror y lo primero que hizo fue "lanzarse a mis brazos". Lo digo entre comillas porque cuando iba a caer en mis brazos, algo se lo impedía.

Algo que no podíamos ver, como una pared.

Y entonces, me di cuenta de que ahí ella estaba luchando por su vida. En ese momento éramos polos opuestos, la vida y la muerte.

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n.a: SALSEOOOOOOOOO HASTA EN MIS VENAS.

internet (elrubiusomg)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora