Harry Potter: Hogwarts Pokémon Adventure pt2

Capítulo 27 : El plato final

Los cuatro se detuvieron repentinamente. La habitación en la que habían aparecido era mucho más pequeña que el largo pasillo en el que habían estado antes y, al igual que Alakazam, era íntimamente familiar.

La oficina del director en Hogwarts lucía exactamente como la última vez que Harry había estado allí, excepto por una diferencia muy notable. El hombre detrás del escritorio no era Albus Dumbledore.

Era Severus Snape y no parecía contento.

"Potter", espetó, su voz rompiendo el silencio de la habitación. "¿Cuál es el significado de este?"

Harry se quedó boquiabierto.

“Profesor…” comenzó pero le fallaron las palabras. Era simplemente demasiado, habían sucedido demasiadas cosas en las últimas veinticuatro horas y, hambriento, exhausto, golpeado y magullado, simplemente no podía seguir el ritmo.

Snape pareció darse cuenta. Hizo una pausa y recorrió con la mirada al grupo, notando su estado desaliñado. Se volvió hacia Alakazam.

"Ya veo", murmuró, volviéndose hacia Harry. Miró a Ron y Hermione también. “Confío en que no estés herido, Potter. Y el señor Weasley y la señora Granger también”.

Vagamente Harry asintió. Tanto Ron como Hermione parecían aún más conmocionados que él. Hermione estaba parpadeando rápidamente hacia Snape, como si su cerebro estuviera estropeado, y Ron lo miraba con la mandíbula abierta.

"Cierra la boca, Weasley, estás atrapando moscas".

La mandíbula de Ron se cerró con un clic. Él parpadeó.

"Maldita sea", murmuró.

"Bastante." Los ojos de Snape se dirigieron al último miembro del grupo.

“¿Y a quién tenemos aquí?”

El miedo llenó el estómago de Harry cuando se giró para mirar a Sirius. Los viejos enemigos se miraban fijamente, cada uno de ellos con una expresión ligeramente distinta a la que esperarían. Para Snape había confusión, como si estuviera pensando que naturalmente no le debería gustar el hombre que estaba frente a él sin estar completamente seguro de por qué, incapaz de reconocerlo. Para Sirius, su actitud hacia Snape había cambiado drásticamente desde la última vez que se conocieron.

Respiró hondo.

"Snape", dijo simplemente.

Los ojos de Snape se entrecerraron. Su boca se abrió con una mueca de desprecio.

"Negro", siseó. Lo miró con absoluto desprecio.

Harry intervino.

"No hay tiempo para eso", interrumpió rápidamente, sabiendo el intercambio de palabras que podría seguir. Incluso mientras decía esto, la boca de Snape se abrió, y la cerró de nuevo bruscamente, dirigiendo su mirada hacia Harry.

"Disculpe", siseó. Harry respiró profundamente.

“Sé lo que va a decir, señor”, dijo respetuosamente, haciendo todo lo posible por mantener todo en calma. "Pero por favor permítanme explicarles".