Harry Potter: Hogwarts Pokémon Adventure pt2

Capítulo 1 : Acercándose

La noche del 28 de julio, la calle Privet Drive en Little Whinging, Surrey, estaba tranquila. Eso no era inusual. Al fin y al cabo, era un barrio bonito y normal. Allí nunca pasó nada extraño.

En el dormitorio más pequeño de una de las casas de esta calle, el número cuatro, estaba sentado un niño llamado Harry Potter, con un libro en el regazo y el ceño fruncido. Pasó la página, el papel se sintió crujiente y pesado entre sus dedos y dejó escapar un suspiro.

El libro que estaba leyendo no era un libro cualquiera. Era un libro de leyendas. Titulado "Dioses en la Tierra", el libro, regalado a Harry por su difunto director, Albus Dumbledore, era la guía más completa del mundo sobre Pokémon legendarios. Aunque era grande y estaba lleno de texto minúsculo, todavía contenía muy poca información. La mayor parte de lo que se sabía era básico, el resto no eran más que conjeturas.

Durante el verano, Harry había empezado a leer 'Dioses en la Tierra' en cada oportunidad disponible, y tenía muchas. Sus parientes, los Dursley, no se preocupaban por Harry ni querían tener nada que ver con su "antinaturalidad" y, de la misma manera, Harry no quería tener nada que ver con ellos. Como resultado, pasó la gran mayoría de su tiempo encerrado en su habitación, pasando las horas esperando su cumpleaños, el 31 de julio, cuando finalmente se le permitiría salir.

El timbre sonó.

Harry hizo una pausa, sus ojos se apartaron del libro mientras sus oídos se esforzaban para escuchar. Probablemente no era nada, Privet Drive era irrevocablemente un lugar muy aburrido para vivir, pero aunque lo más probable era que fueran los vecinos de al lado o algún otro residente de la tranquila ciudad, Harry todavía estaba nervioso. Hoy en día nada se puede dar por sentado.

Al otro lado del rellano podía oír las quejas murmuradas de tío Vernon. Se había acostado para pasar la noche y, aunque aún no estaba dormido, claramente no le agradaba que lo interrumpieran. En este caso parecía tan enojado que preferiría ignorar a quien estuviera en la puerta.

El timbre volvió a sonar, seguido de un golpe firme.

"Qué diablos..." Harry escuchó las maldiciones de Vernon antes de que su voz bajara, bajando a un murmullo bajo afuera. Aún así, estaba claro que estaba despotricando a gritos en los confines de su dormitorio.

"¡Chico!" Vernon finalmente gritó y Harry dejó escapar un suspiro inconsciente de molestia. ¡Abre la puerta, por favor! Y dile a quienquiera que haya decidido molestarnos a esta hora de la noche que se vaya a la mierda, ¡algunos de nosotros tenemos trabajo mañana!

Harry puso los ojos en blanco. Era tarde pero no tanto .

Aun así, se levantó de su cama, cerrando suavemente 'Gods on Earth' mientras lo hacía, y alcanzó su cinturón, con las Pokébolas atadas. Si bien era poco probable, si había mortífagos en el porche delantero entonces debería estar preparado para ellos. Salió al rellano de arriba, dejando la puerta de su habitación abierta para permitir que los Pokémon que estaban dentro, Talonflame, Pikachu y Umbreon, acudieran en su ayuda si era necesario, y se giró para bajar las escaleras.

"¡Chico!" Vernon gritó de nuevo, furioso cuando el timbre sonó por tercera vez, los golpes se volvieron bastante insistentes.

"Me voy", espetó Harry, vislumbrando a tía Petunia mirándolo desde detrás de la puerta de su dormitorio. Comenzó a bajar las escaleras.