"Four years no calls,
Now I'm looking pretty on a hotel bar"
Lucille
Parpadeo dos veces intentando comprender lo que está sucediendo ante mis ojos.
Todo se detiene por un momento y todo lo que hay a mi alrededor es él y el poder que sus ojos aún tienen sobre mi.
Alistair se encuntra parado frente a mi, su sonrisa eclipsando las luces del lugar.
Y mientras sus hoyuelos hacen aparición, lo único que pienso es que las cámaras no le hacen justicia alguna.
¡Por Dios! Era aún mas guapo en persona; mucho más que el dia en que lo conocí.
¿Como puede ser alguien tan jodidamente guapo?
Mi estómago se retuerce mientras descubro que las malditas mariposas que yo daba por muertas, siguen ahi.
Claro que había cambiado; estaba mucho más alto, más adulto y sus brazos se veían mucho más ejercitados, aun así, su sonrisa seguía siendlo tan amable, tierna, su voz era la misma melodía que solía disfrutar.
Y aunque sus ojos seguían siendo divinos, esta vez lucían mucho más cansados.
—¿Que haces aqui? O sea, quiero decir es genial pero... wow—dijo tartamudeando suavemente. —Ha pasado mucho tiempo— Una risa nerviosa escapó de sus labios al tiempo que el frotaba su nuca en un movimiento suave.
Aquel gesto en cualquier otra persona hubiera sido extraño y me hubiera causado entornar los ojos,pero en él me parecia completamente adorable.
—Hola Alistair—su nombre se deslizó en mis labios como si jamás lo hubiera dejado de pronunciar. —Demasiado tiempo—digo ofreciendole una sonrisa triste.
—¿Por qué no contesta? Necesito hablar con él—la suplica en mi voz es tan lastimera.
—Porque no quiere saber de ti Lucille, ¿acaso no lo entiendes?— casi puedo escuchar mi corazón romperse...
Duele saber que nunca dije adiós. Dijimos.
Todo lo que hubo fue una puerta cerrada y lágrimas en los ojos.
Cata nos mira, su sonrisa levemente burlona y graciosa. Sus ojos van de él a mi, una y otra vez.
—Asi que se conocen...—no es pregunta, es afirmación.
Casi puedo ver los engranes de su mente girando a mil por hora.
Aclaro mi garganta, intentando deshacerme del nudo causado por los recuerdos atrapados en la misma, un suspiro apoderandose de mi.
—Soliamos ser amigos hace un buen tiempo—el rostro de Alistair se desencaja cuando escucha como me refiero a el, volviendose más dura.
¿Que quería que dijera? ¿Qué fuimos algo pero nada a la vez? ¿Que eramos algo pero luego me echó de su vida?
Sus ojos pierden el brillo y ahora si puedo claramente ver su agotamiento.
—¿Ustedes?—pregunto, mirando hacia Cata, segundos después soy consciente de lo tonta que parezco al hacer esa pregunta.
Un conejillo lampareado.
Era tan frustrante no poder pensar o hablar correctamente, aún más frustrante era el hecho de pensar en la poca suerte que tenía; mi primera noche de fiesta en Lyon y era tan desafortunada como para toparme con él chico que me había roto el corazón.
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Una última vez
RomanceY es que había algo en esa mirada, que la llevaba a querer regresar al momento en que lo conoció. Al dia en que había visto esos ojos verdes que le robaban el aliento, al instante en que su voz llenó sus oídos con aquella melodiosa voz. A la primer...