EXTRA: La Torre de MinSeok

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Cada persona es un mundo por explorar, repleto de sorpresas casi infinitas y desconocidas.

MinSeok concebía a cada individuo no solo como un mundo, sino más bien como una torre única y personal. Según su perspectiva, todos habitamos en nuestra propia torre, siendo los protagonistas de nuestra historia algo análogo a la narrativa de Rapunzel. En esta interpretación, cada persona construye y moldea su vida en el interior de su torre, reflejando esa similitud con la princesa, que tejió su existencia entre las paredes de su morada.

Es importante aclarar que no estamos prisioneros de la torre, más bien, somos arquitectos que la construyen. Y solo nosotros ponemos las reglas en el interior.

A través de nuestras paredes nos construimos, y, como es de esperarse, permitimos que los demás entren, al igual que Flynn logró alcanzar a Rapunzel.

Entremos ahora en un pequeño cuento, o mejor dicho, la historia de la torre de MinSeok.


Érase una vez, en lo más alto de una torre inalcanzable, un joven llamado MinSeok.

Vivía en una estructura escalofriante. Los ladrillos de la torre eran blancos, y otros casi negros por la humedad. Por otro lado, las tejas del techo, en su mayoría, estaban torcidas y caídas, y había una espesa maleza alrededor. Contemplar la edificación era como ver una torre vieja de algún cuento antiguo de brujas.

Los que deseaban conocer los misterios detrás de la torre de MinSeok, solo tenían una opción: una pequeña trampilla en su base. Sin embargo, para ganarse la entrada, los candidatos debían demostrar tu confiabilidad. En caso de tener éxito, se le entregaba al elegido una llave que caía desde lo más alto de la torre.

Con la llave en mano se desbloqueaba la trampilla, y al entrar tenías la posibilidad de ascender por una serie de escalones, con cada paso se imponían puertas distintas. Si MinSeok lo deseaba, tu llave podía desbloquear todas las puertas de tu camino, incluso podía conducirte a la habitación más alta donde él residía.

MinSeok dirigía la travesía y trazaba el itinerario y los límites de la exploración. Solo se podía conocer lo que él quería que vieras y, con suerte, llegar a la cima.

Pero existía también la amenaza de que ninguna puerta se abriera o salieras volando del lugar.

En la vida de MinSeok, solo un puñado de personas poseían una llave para acceder a su torre: sus padres, su hermana y MinHyung. Estos cuatro exploraban juntos el mundo que yacía tras las paredes de la torre.

Pero si se hablase de candidatos favoritos para alcanzar la cima, Lee MinHyung sería el primero; un antiguo amigo, se enlistaba como el más probable. A los ojos de MinSeok, era quien más luchaba por abrirse camino entre las escaleras y puertas, y a quien más le concedía el acceso a nuevas habitaciones. No obstante, ser el favorito no garantizaba un camino despejado.

La dificultad para avanzar en la torre se había incrementado recientemente. Al explorar una habitación, era probable que en cualquiera el invitado saliera expulsado hacia la salida o llevado de vuelta a la base. Y aquellos que deseaban ingresar a la torre carecían de toda posibilidad.

MinHyung, tras subir y bajar escalones durante un buen rato, intentaba encontrar una cerradura compatible con su llave. Sin embargo, cada vez que lo lograba, era expulsado; incluso estuvo al borde de ser sacado de la torre por insistir en una puerta bloqueada.

Finalmente, se encontró frente a una puerta que parecía ser de la tristeza. Era de un roble oscuro, lleno de humedad, con un dibujo rápido de un ojo con lágrimas; eran muy los garabatos de un niño. Al acercarse a la perilla, la llave comenzó a brillar en sus manos, anunciando la apertura de la puerta.

New Road - Keria x GumayusiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora