Entre Dimensiones. - Tortillaland, QSMP, +

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Lo buscó en su castillo, no estaba, lo buscó en la favela, no estaba, lo buscó en su casa, no estaba.

¿Donde carajos se había metido Roier?, Cellbit estaba preocupado.

Le había escrito almenos 30 o más mensajes preguntándole donde está o si se siente bien, y Roier solo los deja en leídos.

Le deja un poco tranquilo el hecho de que los lea, pero no del todo.

Y si.. la federació-..

NO. NONONO, JUSTO AHORA NO.

No está en ninguna parte, pero no piensa creer que la federación lo secuestró, este no es un buen momento para que hagan eso.

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Varios minutos antes.

Roier se teletransportó a un lugar alejado pero cerca de el castillo de Cellbit, le dolía demasiado su cabeza, repentinamente.

Por alguna razón sintió la necesidad de ir a un lugar privado, no quiere que nadie lo vea cuando está vulnerable por así decirlo.

¿Como era posible?
Él solamente estaba conversando con ese tal Juan y Mariana, y de la nada le agarró ese dolor de cabeza super insoportable.

Estaba en un bosque.

Le dolía demasiado, se sentó al lado de un árbol mientras se cubría la cabeza con sus manos.

¿Porque? No es normal, el nisiquiera estaba enfermo, y si se enfermó?, puta madre.

Agarró su celular y trató de escribirle a Cellbit, quien estaba preguntándole donde estaba, pero no se podía ni mover, el dolor de cabeza le nublaba la vista.

Solo logró entrar en el chat, pero no podía ni ver las letras del teclado.

Ahora tenía dolor de cabeza y mareos.

—Verga.. y si estoy embarazada?...—Se preguntó Ro en voz alta. —Hay dos opciones, o estoy embarazada o me muero hoy.

Detrás del árbol que estaba sentado, empezó a escuchar unas voces a lo lejos, no sabe si el dolor de cabeza le está afectando o está loco.

Las voces cada vez se acercaban más, al parecer eran dos personas, pero una voz se le hacía conocida.

No podía pensar, el dolor ya estaba acabando con él.

—¿¡Pero como putas se abrió ese portal!? ¿¡DESDE CUANDO HAY MÁGIA!?.— Se escuchaba una voz, cada vez mas cerca de Roier.

—no lo sé pendejo.. ESPERA.. ¿¡Y SI FUÉ SALLY!?, ¿¡SALLY HAROLD!?— Se escuchó de la voz contraria, la voz que a Roier se le hace conocida.

—¿YA VAS A EMPEZAR CON TUS MAMADAS OTRA VEZ?, ENTIENDE WEY, SALLY ESTÁ MUERTO, SI QUE ESTÁS PENDEJO ROIER.

¿¡ROIER!?, ¿QUE PUTAS?

Roier no pudo moverse del árbol, apenas y se concentraba en lo que decían.

Pero cuando el chico dijo "Roier", Roier soltó un quejido de dolor, sintió una punzada en su cabeza, haciendo que las dos personas que estaban discutiendo se callen y se asusten.

-Roier?.. ¿Porqué te escuché a tí y tú ni abriste la boca?...- Dijo el chico de acento guatemalteco. Asustado.

-S-..se-.. se escuchó allá......- Se escuchaba su voz temblorosa, al parecer ese tal "Roier" apuntó en el arbol de donde habían escuchado el quejido.

Roier se tapó la boca para evitar seguir haciendo esos sonidos, pero ya era muy tarde, los chicos ya se estaban acercando.

Lentamente Roier escuchaba los pasos, ese árbol lo cubría bien, pero no por mucho.

Cada vez lo escuchaba más cerca, cada vez se le nublaba mas la vista, y el miedo lo invadía.

-Okey Natalan, a la cuenta de 3 miramos detrás del árbol.

¿Natalan?... ¿¡QUE!?