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Maddison Smith

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Maddison Smith

Daryl había salido por la mañana, se que para él es raro este tipo de vida y le costaría acostumbrarse. Para mi sorpresa cuando baje a la cocina Carl y Lucas habían preparado el desayuno.

- ¿que quieren de mi? -Lucas se tocó el pecho ofendido por mi pregunta, yo solo sonreí.

- nos ofende la pregunta, sólo queríamos prepararte el desayuno antes de que fueras a tu trabajo-el miro a Carl dándole un leve codazo.

- y tal vez cuando vuelvas puedes preparar otro...¿pastel?

- lo sabía -los apunte con el dedo, tome un tostado dándole un mordisco- está bien, haré uno cuando vuelva -me despedí de ellos dándoles un beso en la mejilla- ¡cuiden a Judith!

Llegando a la huerta sentí la voz de alguien a lo lejos, me di la vuelta y era Steven se veía muy sonriente. Se acercó saludándome con un beso en la mejilla, me contó sobre qué Deanna había organizado una fiesta dijo que suponía que lo hizo por nuestra llegada.

- ¿y de donde supone que saque un vestido?

- no te preocupes de eso, yo me encargo de conseguírtelo- puso su mano en mi hombro sonriéndome.

- ¿seguro? No quisiera molestar-el asintió- gracias en serio.

- no es molestia, menos si es para ti.

- bueno granjero, ponte a trabajar.

Tomamos las regaderas llenándolas de agua, Carmen no estaba porque uno de sus hijos estaba enfermo y tenía que cuidarlo.
No tardamos mucho regando, con Steven nos habíamos sentado abajo de un árbol hacia mucho calor.

- te invito una limonada, ya vengo-vi como se alejaba y suspiré mientras veía la huerta, me alegraba verlo vivo aunque era raro verlo y no sentir lo mismo como antes- ten esta bien fresca.

- gracias Steven-le sonreí dandole un sorbo a la limonada, era un gran placer sentir el líquido pasar por mi garganta seca- esto esta buenísimo.

- lo se, lo se. Soy especialista en limonada.

Me despedí de Steven y regresé a la casa, vi que los niños no estaban así que fui a ducharme.

Baje las escaleras sintiéndome fresca por la ducha, vi que Glenn y Jonatan estaban acostados en el sillón charlando, les reste importancia. Escuche como tocaron la puerta y cuando la abrí era Steven con una caja en manos.

- como te lo prometí -me extendió la caja sonriente, mire de reojo como Jonatan se asomaba y vi su rostro pálido al ver a Steven- ¿Jonatan?

- ¡Steven! -se acercó a él para abrazarlo fuerte y sacudirlo- amigo me alegra tanto verte ¡Glenn mira esto!

- no me jodas, que alegría verte Steven- Glenn se acercó sonriente a Steven abrazándolo- te extrañé.

- también me alegra verlos.

𝖊𝖑 𝖎𝖓𝖎𝖈𝖎𝖔 𝖉𝖊𝖑 𝖋𝖎𝖓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora