3.

234 23 7
                                    


"Aunque el dolor te hace llorar... Tú decides si tus lágrimas te quiebran y te dañan o simplemente te sanan las heridas..." S.J.

JAKE

Se preguntarán cuándo fue que me di cuenta que la vida que estaba viviendo no era lo que quería... Sino que era algo que odiaba y que estaba seguro no podría seguir con ella...

Creo que pueden imaginar las comprensibles y simples razones que puedo tener para querer huir de ese mundo de "Mafia". Y más siendo una persona diferente a lo que se espera de un mafioso...

No digo que no he hecho cosas cuestionables para ser mal vistas... Pero en el fondo sé que no soy ese tipo de persona.

No soporto las injusticias, los engaños, los robos, los delitos... Ni mucho menos... Las muertes... Esa es la razón más grande de mi repudio hacia esta vida.

Estoy rodeado de muerte...

Y aunque, en parte me sienta "a salvo" por tener quién cuide mi espalda, y sea "el hijo" del hombre más poderoso, del mafioso más peligroso en la sociedad...

Es lo que precisamente eso significa que tengo tanto miedo de todo esto...

El ser parte de quien daña y mata... Pero nunca ser quién es maltratado, robado...

Asesinado...

Supe que no quería ser el heredero de todo eso cuando... Por mi culpa, muchos murieron, y en especial, alguien a quién yo consideraba un amigo... Fue asesinado.

Era un joven de 11 años cuando conocí a Choi Beomgyu... Él era hijo de un socio de mi padre...

Como éramos de la misma edad, nuestros padres nos permitían jugar y platicar de vez en cuando... Sólo eso, nada más...

Según nuestros padres sería algo infortunado, e inapropiado que nos encariñáramos demasiado.

Ya que eso, según ellos, nos haría ser débiles, era algo que mostraba lo fácil que podríamos caer ante alguien...

Aun así... Nos llamábamos "amigos", pasábamos el único tiempo que teníamos libre para reír y jugar como niños normales a nuestra edad...

Él me confesaba cosas acerca de su padre y su entorno, me confiaba sus miedos y sus sueños, al igual que yo.

Por primera vez en mucho tiempo...

Estaba con alguien que me comprendía, que no esperaba ver en mí a un monstruo... Y que no era una mala persona...

Más todo acabó el día en que nuestros padres salieron mal en sus tratos... De los cuales nunca me enteré.

Como siempre, lo que estaba en juego entre ellos era más importante que sus propios hijos.

Ese día en que los Shim y los Choi se "declararon la guerra", mi padre entró a mi lujosa habitación (cosa que no hacía tan seguido), con una cara dura y seria, furia en su rostro, entonces supe que algo importante y seguramente malo, estaba ocurriendo...

── Sólo vine a avisarte que desde hoy los Choi tienen prohibido venir o acercarse a esta casa... En especial a ti... Ya que, ya no somos socios. Por lo que no tiene sentido que esperes volver a ver a ese miserable hijo de Choi ¿Entendido? ── Mi padre sonaba más que molesto con la situación que estaba ocurriendo entre él y el señor Choi. Y sí, yo quería alegar y cuestionar sobre eso...

Pero lo tenía prohibido, debía acatar las órdenes de mi padre, me gustaran o no.

Jamás se me permitió desobedecer, mucho menos ser "cobarde".

Toxic Loneliness ■ JakeHoonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora