THE BLACK PHONE ( one shots)

Robin Arellano 2

[P.O.V [T/N]

Varias zonas de mi cuerpo sienten dolor en este momento. Mi trasero por estar tanto tiempo sentada, mis piernas estaban acalambradas, mis ojos me dolían por ver tanto tiempo una pantalla y mis dedos ahora entumecidos; agarraban con posesividad el dinero que gane con sumo esfuerzo. 

Camine hasta el baño, abriendo la puerta y posteriormente cerrándola con llave para no tener interrupciones. Al verme en el reflejo del espejo, pude notar que no estoy tan desarreglada como pensé, realmente me veía decente; Sin embargo, decido peinar mi cabello en un simple moño, retoco mis labios con el color rojo de mi labial. 

Me iba a marchar cuando el sonido de un jadeo doloroso, me hace detener abruptamente. Retrocedo sobre mis pasos, analizando las cortinas cerradas de la bañera, lugar de donde viene ese sonido. Con suma curiosidad camino hacia allí, extendiendo mi mano, tomando el borde de la cortina y quitándolas bruscamente. Me sorprendí al ver alguien semi-inconsciente tumbado en la tina. 

--oye ¿estas vivo?-- toco su hombro con mis dedos, moviéndolo un poco y sin recibir alguna reacción. Ese cabello largo lo reconozco, dirigí mi mano a su cara, apartando un mechón de cabello y dejándolo detrás de su oreja --¿Robin?-- se veía fatal, sus ropas estaban desordenadas. Aunque debo de aceptar que la chaqueta de cuero y pantalones ajustados se ajustaban a su figura.

Analice un poco más el entorno, notando una botella de cerveza a un lado de su abdomen. Tomé el envase de vidrio y lo lleve a mi nariz. Su olor era más fuerte de lo común, eso era raro y sospechoso. Le mire una vez más al escuchar ese mismo sonido; al moverse su cabello regreso a su cara ¿Dónde esta su banda? 

--Robin, despierta-- ahora moví bruscamente su cuerpo, sin obtener reacción. Ver sus cejas arrugarse, mientras su respiración agitada y su rostro sudoroso; preocupa mi mente --¡ROBIN!--

Cuando grite sus ojos se abrieron abruptamente, reincorporándose sobre la tina e intentando recuperar el aíre con respiraciones rápidas y profundas. Miro a todos lados, hasta que su rostro se poso en el mío; eso pareció calmarlo. 

--¿estas bien? estas agitado, Robin-- me levante de mi lugar, tomando la toalla de manos, remojándola y regresando; arrodillándome al lado de la tina, ofreciéndole el objeto --pásala por tu rostro, el agua estaba fría, eso te refrescara--  

Acepto la toalla, siguiendo mis indicaciones con suma lentitud, sus ojos miraban la pared blanca frente a él. Al parecer estaba en otro mundo justo ahora. Me levante del suelo, con la intención de caminar hacia la puerta, pero el agarre repentino de mis dedos me detiene. 

--no te vayas-- su mirada de suplica me hace tensarme en mi lugar. Eso era nuevo 

--bueno...yo-- apunte a la puerta, de hecho no hay una razón real para irme de aquí --bien-- 

Me senté en el suelo, observándole sin ninguna expresión latente. Solo lo analizaba, continuo paso la toalla por su rostro y cuello; sin soltar mis dedos, los agarraba con suma delicadeza, así pude notar que sus manos estaba frías. 

--¿estabas durmiendo? o ¿estabas inconsciente?-- 

--la segunda-- fue una respuesta corta, mi mirada insinuó que continuara --por esa cerveza, fue la única que tome pero sabía extraño-- toco su cabeza, notando la falta de su banda. Soltó un suspiro.

--¿la agarraste por ti mismo?-- 

--no, me la ofreció Connor-- 

--no lo vuelvas a hacer, ese idiota tiene la costumbre de adulterar las bebidas. Casi todo mundo lo sabe, por eso prefieren mantenerlo alejado, ni siquiera lo invitan a las fiestas-- no era un rumor, yo mismo vi cuando lo hacía y le advertí a todos. No entiendo porque las personas siguen teniendo algún contacto con él