S luego de graduarse de primaria, inmediatamente pasó a inscribirse en un colegio privado para estudiar secundaria. Colegio que ahora es una suerte de cárcel, en la cual hay que pasar como 3 portones para poder entrar. En ese tiempo eran 2 portones... al menos eran menos. Pero retrocederemos un poco más, en la época donde solo había un portón.
S, después de una buena vida y educación en primaria, estaba emocionado, pero a la vez nervioso, habría nuevas cosas que descubrir. Además, S solo había escuchado rumores de secundaria; como que segundo año es el año más difícil, que los profesores son más estrictos, etc. Al final, estos rumores fueron ciertos en menor o mayor medida.
Eso sí, S conserva recuerdos gratos sobre su secundaria, como su primer amigo Julio; un pelirrojo que siempre defendía que su cabello era rojo natural pero le acusábamos de ser oxigenado, su paso por la banda rítmica del colegio y lo destacado que era tocando el baquetón – Una especie de tambor que también es llamado "bajo" – tanto que aún recuerda el nombre y el ritmo de canciones como: "El palo de mayo", "Tambora" y "La marcha de la bandera", pero más que todo, recuerda y aprecia los amigos que obtuvo.
Tan buena fue su amistad que, el grupo de amigos se autoproclamó: "La Mafia".
Fue tan fuerte su amistad que, hoy en día, más de 5 años después de secundaria, todavía siguen haciendo mafia-reuniones, mafia-viajes a la mafia-cueva y dentro de algunos años habrá un mafia-móvil. Cuando S se reúne con sus amigos, pareciera como que el tiempo no pasara. Pero más en el fondo de su corazoncito, recuerda "Amores" que darían un giro de 180 grados a su vida amorosa. Comencemos por el primer amor de S dentro de esta cárcel-colegio.
K secundaria
"Secundaria" no viene de ser la segunda K en su vida, viene de "su secundaria" ósea, el colegio.
El director del colegio invitaba a radios nacionales a armar el desvergue, ya que nuestro colegio debía su nombre a un sabio, que en su juventud se dedicó a fiestas, alcohol y damas de compañía, por consiguiente, era lógico que los estudiantes fueran alocados y fiesteros – Como que el espíritu de este sabio había reencarnado en cada estudiante - S con 12 años, era estudiante de primer año B, en recreo, se encontraba arrinconado, observando a los demás jugar, correr y como en aquella ocasión, también bailar.
En esos años estaba de moda el "DanceHall" un ritmo jamaiquino – creo - en el cual, la pareja rosaba sus cuerpos constantemente, así como el tan famoso "Perreo" del reggaetón urbano de Wisín y Yandel, Tito el bambino, Héctor el "Father", Daddy Yankee, etc y que más adelante volvería con Tokischa, Kali Uchis, La Rosalía y El "Meloso" – Me siento todo un crítico de la música de RD y PR ¡ya tu sabe mai! -.
En una de esas donde S hacía gala de sus habilidades deportivas, fué llamado por un grupo de niñas, las cuales le proponen jugar un rato voleibol, en busca de nuevas experiencias, acepta. Luego de unos segundos, S nota que una de ellas lo mira tal cual tuviera pintura de payaso en su jeta. Esta chica, Sin mediar palabras, arremete contra la humanidad de S y comienza a rozar partes de la anatomía humana conocidas como glúteus maximus contra la pelvis de S.
El roce constante de esa jovencita era una sensación nueva para S Pero, debido a sus experiencias pasadas con niñas, S no creía que esto estuviera pasando. Era algo fuera de su mundo y por lo tanto no supo cómo reaccionar.
Ante tal provocación S parecía paralizado por la chicharra paralizadora del chapulín colorado, a la vez que sus cachetes morenos se llenaban de sangre, cosa que no iba hacer lo único lleno de sangre dentro de un rato.
Eso es algo normal entre los chicos de su edad y potenciado por el baile de esta jovencita, S no tenía nada que hacer.
Los movimientos de esta chica no eran algo común y corriente, había algo que sugería que tenía entrenamiento previo en el arte de mover cadera.
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Del fondo al no tan al fondo
RomanceEsta es una recopilación de historias protagonizadas por "S" en las cuales su vida amorosa compartirá pantalla junto a él.