Cinco

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Al termino de la gran celebración los futuros reyes fueron obligados a pasar más tiempo juntos, al fin y al cabo serían marido y mujer al fallecimiento del monarca.

Los jóvenes fueron al jardín, la princesa ordenó que nadie debe interferir en lo que ella llamo "cita", ni siquiera el príncipe HoSeok.

El pequeño no confiaba en aquella joven con bastantes complejos de superioridad, ni siquiera faltó intercambiar palabras, su mirada habló por ella.

-¡Padre! - exclamó el pequeño mientras corría al visualizar la figura imponente del Rey.

El mensajero del Rey Jung detuvo al príncipe, no debía hacer tales actos en público.

-Dime, príncipe HoSeok - le sonrió.

-Padre...perdón, Rey Jung, ¿puedo preguntar algo?-

El mayor asintió nuevamente sonriendo, ordenó estar solo junto a su pequeño hijo.

-¿Qué sucede hijo? ¿Te preocupa algo? ¿Quieres algo? - preguntaba sereno.

-Papá...¿por qué mi hermano tiene que casarse? Él se ve triste porque no la quiere - su voz temblaba.

-¿Él te lo ha dicho?-

-...No papá-

-HoSeok, hijo, nadie va a quitarte a tu hermano, la princesa no es una mala persona, yo prometí a tu madre cuidarlos y es lo que haré - finalizó dando un beso en la frente a su hijo pequeño.

El mayor se retiró junto a su mensajero, aún debía trabajar más.

Tal vez su padre tiene razón, debía conocer un poco más a la prometida de su hermano.

La luz intensa de la luna indicaba la media noche, SeokJin había terminado su reunión con la princesa, ya era hora de descansar, no sin antes encontrar a HoSeok esperándolo en la puerta principal del jardín.

-¿Qué haces aquí? Hace demasiado frío-

-Lo sé, te estaba esperando para ir juntos a dormir - sonrió, tomo el abrigo que había guardado para dárselo.

La princesa observaba la escena confundida ¿por qué con el pequeño se preocupaba tanto y con ella no? Eso le irritó un poco.

-Disculpa princesa, es hora de retirarme, que sus damas de compañía la guíen hasta su habitación, permiso - hizo una reverencia, tomó a HoSeok de la mano y se dirigieron al palacio interior.

Eso la irritó más.

Ambos entraron a la habitación del rubio, cambiaron sus ropas en su vestidor, cómo todos los días, el primero en ser arropado fue HoSeok, Jin tocaba los castaños cabellos de su hermano menor, y acariciaba su frente, justo como su mamá lo hacía cuando estaba junto a ellos, HoSeok sentía la calidez del mayor.

-¿Quieres escuchar la historia de la tienda mágica? - pregunto el mayor mientras se metía a su cama, tratando de abrazar a su menor.

-¿La tienda mágica? Quiero saber de ella - se dejo envolver entre los brazos de su mayor oliendo la esencia de sus prendas.

-Esta ubicada en el páramo, lejos de los reinos, solo gente con sangre noble puede ingresar a aquella tienda, tambien magos para hacer un par de intercambios, hay muchísimos amuletos para lo que imagines, más riqueza, amor, popularidad, poder... - fue interrumpido.

-¿Puedo desear lo que quiera? ¿Ser igual de guapo que tú? - bromeó

El mayor dio una risilla.

-Lo que tu corazón desee, pero tienes que dar algo equivalente a tu deseo, si deseas belleza, la tendrás pero no podrás ser feliz... o tal vez tengas que dar tu dinero - bromeó.

ᴍᴀɢɪᴄ sʜᴏᴘ  ✧K.TH+JH✧Donde viven las historias. Descúbrelo ahora