005

104 18 5
                                    

TaeHyung se mantenía inmóvil, la cercanía de JungKook lo congelaba y su respiración era cada vez más pesada. Se encontraban tan cerca que era capaz de admirar cada lunar en su rostro pálido. El frío que transmitía JungKook le ponía los pelos de punta. Sus manos se sostenían con fuerza de la tela del sillón en el que se encontraba.

JungKook sintió su cuerpo flotar, sus ojos se mantenían fijos en los contrarios, de pronto la imagen de TaeHyung se fue esfumando poco a poco hasta desaparecer y nuevamente se encontró en su habitación mirando aquel gran ventanal frente a sus ojos.

Miro sus manos sintiendo aún el calor de TaeHyung presente.

Namjoon corría de un lado a otro en busca de su rey

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


Namjoon corría de un lado a otro en busca de su rey. Suspiro cuando por fin lo encontró.

—Señor -se arrodilló- está todo listo para partir.

Aquel alto hombre dio la vuelta y miro a su sirviente.

—Puedes levantarte -ordeno- vendrás conmigo al igual que Jung Hoseok

Namjoon se levanto.

—Como ordene mi señor.

Namjoon miro a su rey salir de la habitación a pasos rápidos, haciendo que su pesada capa de piel volará.

—Oh dios señor JungKook ahora que hizo -se quejo-

Los relinchidos de los caballos eran cada vez más, las rocas hacían que el carruaje se moviera de un lado al otro. Namjoon miraba a su rey, su rostro se mantenía sereno y tranquilo.

—¡Anda muévete!

Namjoon rodó los ojos cuando volvió a oír aquella voz que le era tan desagradable.

—Se que no te agrada que el venga con nosotros Nam -lo miro-

—Lo siento señor -reverencia-

—Esta bien, después de todo el está aquí para cuidar mi seguridad, hace mucho que no me encuentro lejos de casa -suspiro-

—Esta bien, después de todo el está aquí para cuidar mi seguridad, hace mucho que no me encuentro lejos de casa -suspiro-

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Jungkook miraba con atención el fuego, su mirada se encontraba perdida y llena de ilusión. La puerta de su alcoba se abrió de golpe dejando ver a su jefe de batallón.

LA CORONA DE HIELO Donde viven las historias. Descúbrelo ahora