EL FARMACÉUTICO

CAPÍTULOS DEL 260 AL 265

CAPÍTULO 260. LESIÓN
POR LESIÓN (1)

Lin Yi se acercó y ayudó a Pei Xuanqing a resolver el pangolín y luego lo puso todo en el anillo de almacenamiento.

"Hemos buscado por casi toda la zona de alrededor", dijo Pei Qi.

El resto de la familia Pei fue muy rápido, especialmente cuando oyeron el sonido de Pei Xuanqing y el pangolín luchando en la distancia. Lin Yi adivinó que estaban estimulados por Pei Xuanqing.

"Entonces, sigan adelante", dijo Pei Xuanqing.

Tardaron un día entero en buscar por las colinas circundantes, y la única bestia demoníaca que encontraron fue el ciempiés gigante de nivel seis del principio. El resto estaban por debajo del nivel seis, y Pei Qi no tuvo que volver a luchar por el camino.

"Hoy no nos hemos encontrado con nadie más, pero puede que mañana no sea así. Esten atentos mañana, y si nos encontramos con algún otro equipo, no tendremos piedad mientras no atentemos contra la moral", dijo Pei Xuanqing a los demás del equipo.

Después de un día de duro trabajo, el equipo aún tenía un persistente resplandor, y ni siquiera pensaron en las palabras de Pei Xuanqing antes de responder.

"Descansaremos un poco esta noche y haremos que dos personas vigilen la noche por turnos." Pei Xuanqing dispuso los vigilantes para la noche. Él y Lin Yi vigilarían durante la primera mitad de la noche, mientras que Pei Qi lo haría durante la segunda. Teniendo en cuenta que era la primera noche que pasaban en el reino secreto, Pei Xuanqing dio tiempo a todos para adaptarse.

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Tal vez porque estaban un poco agotados durante el día, se durmieron después de comer algo sencillo.

El lugar donde descansaban ahora era un llano en la ladera de la montaña, que estaba relativamente abierto por ambos lados y no tenía ningún refugio, por lo que cualquier ruido podía ser encontrado en primer lugar.

Lin Yi y Pei Xuanqing se sentaron junto al fuego, mirando cómo dormían a su alrededor: "Hoy ha sido demasiado estímulo para ellos. Estaban todos a tope cuando luchaban contra las bestias demoníacas."

Pei Xuanqing dijo: "Diez de ellos son del reino Cultivador Espiritual, que es comparativamente bajo, y tienen los recursos de sus familias para mantenerlos, por lo que rara vez tienen oportunidad de salir a entrenar. La apertura del Reino Secreto Xunfeng llega justo a tiempo. Puede que no sea algo malo para ellos."

Lin Yi comprendió el significado de Pei Xuanqing y dijo: "Te preocupas mucho por ellos."

"Sólo puedo hacer un poco. En última instancia, lo que más importa son sus propios esfuerzos. Los recursos de su familia también son limitados. Si no crecen por sí mismos, la familia acabará siendo incapaz de mantenerlos", dijo Pei Xuanqing.

"Porque despertar la esencia espiritual es relativamente difícil, y ahora cada familia se preocupa mucho por sus discípulos que pueden despertar su esencia espiritual. Hacen todo lo posible por protegerlos, por miedo a que cometan algún error. De hecho, esto no es bueno para ellos", dijo Pei Xuanqing con una mirada seria.

Lin Yi sabía muy bien lo que Pei Xuanqing estaba pensando, porque cuando Pei Xuanqing estaba en el reino de Cultivador Espiritual, se atrevió a entrar en el Bosque de las Bestias Demoníacas y desafió a las bestias para perfeccionarse, incluso a costa de resultar gravemente herido. Por eso pudo haber encabezado el Torneo de las Diez Ciudades.

"¿Le has mencionado esto al jefe?" preguntó Lin Yi.

Pei Xuanqing dijo: "Mi abuelo conocía este problema desde hace mucho tiempo, por eso permitió que entraran tantos discípulos Cultivadores Espirituales esta vez.