Capitulo 1

36 5 2
                                    

El vuelo se me hizo infinito, el doctor Meléndez estaba preocupado y para saber eso solo tenía que escuchar su agitada voz. Tan solo nos quedaban algunas horas de viaje y mi mente se encontraba pérdida completamente... Muchos pensamientos deambulaban por mi cabeza sin rumbo...

>>>¿Y si le sucede algo?<<<

>>>¿si la pierdo para siempre?<<<

>>>¿si nunca más la vuelvo a ver?<<<

No quería que fuese nada malo, me aferraba a la idea de conservar a la única persona que me demuestra interés y amor y aunque esto quedaba en manos de la cruel vida, a mí solo me tocaba esperar.

Al aterrizar la esposa del amigo de mis padres, ya nos estaba esperando, preparada para llevarnos al hospital de Port Fairy, NIC, una ciudad costera en el suroeste de Victoria, Australia, habíamos ido en vacaciones a visitar a la abuela de vez en cuando y aunque me había pasado la gran parte de ellas discutiendo con mis padres sobre nuestro próximo destino al terminar el verano, había logrado conseguir algo de tiempo para escabullirme y pasear por la costa.

_Era justo como la recordaba_ susurre mientras Juliana conducía tranquilamente por la carretera central. Mis padres a penas me habían prestado atención, pero la verdad tampoco es que me importara mucho, estarían ocupados con >>>sus cosas<<.

Al parecer Juliana me escucho susurrar y me respondió casi al instante rompiendo el curso de mis pensamientos.

_Las cosas no han cambiado mucho la verdad_ dijo reflejando en su rostro una pequeña sonrisa que puede ver a través del espejo retrovisor.

Juliana siempre había sido muy cariñosa conmigo, era demasiado buena con todos, lastimosamente el mundo es muy injusto, y producto a un trágico accidente se quedó sin la posibilidad de tener hijos. Ella no lo muestra, pero lo sufre en silencio, a veces personas que no se merecen cosas malas, llevan cargas demasiado pesadas y duras de soportar. Para su suerte conoció al doctor Meléndez y juntos viven en casa de mi abuela alegrando su vida. Ojalá y...

Habíamos llegado al hospital en menos de lo que me esperaba y como era de esperarse, el doctor estaba justamente en la puerta aguardando por nosotros con la mayor sonrisa del mundo... Eso me tranquilizó.

_Hola viejo amigo_le dijo mi padre abrazándolo y dejando caer sobre su espalda una palmadas leves.

_Eh aquí al hombre más visto en todo el mundo_ dijo en tono burlón correspondiéndole el abrazo.

Mi padre puso una pequeña mueca de burla y los ojos del doctor se dirigieron a mi madre para saludarla, mientras que yo ayudaba a Juliana a cerrar las ventanillas del coche.

Rápidamente los ojos de él terminaron clavándose en mi dejando reflejada en su cara una expresión de asombro.

_Vaya, vaya. Pero si es mi niño pequeño favorito, ven acá y dame un abrazo_ Exclamó dirigiéndose a mí con los brazos bien abiertos

_Vaya, vaya, pero si es el doctor que necesita lentes para ver todo lo que he crecido en estos últimos años_Dije en un tono burlón, acercándome hacia él para abrazarlo.

_Has crecido sí, pero seguirás siendo mi niño pequeño siempre.

_Venga ya, ahórrate las cursilerías, tío. No te quedan para nada_No puede contenerme y terminé riendo a carcajadas.

_¿Ves Juliana te dije que no ¨molaría¨ que le dijera eso?_Dijo dirigiéndose a su esposa con una cara risueña, acercándola para darle un corto beso como saludo.

_ Vamos Cameron esas frases nunca pasan de moda_Dijo con una sonrisa en los labios que me contagio casi al instante.

Mi madre nos cortó la conversación, justo cuando dijo: _ Doctor Meléndez. ¿Le importaría que viéramos a mi suegra?

_O Sophia no tienen de que preocuparse ya se encuentra mucho mejor, tuvo unos bajones de azúcar que en un principio me asustaron debido a su diabetis, pero ha mejorado notablemente.

De camino a la habitación no dejo de contarnos algunas ¨pequeñas medidas¨ que deberíamos tomar con ella. Una vez abierta la puerta, ahí estaba. Sentada en aquella camilla de hospital leyendo uno de sus polvorientos libros de hace más de cien años. Tenía el cabello recogido en una coleta y una bata, la cual la manta cubría hasta la cintura. Cuando nos notó, pude ver la felicidad en sus ojos, era tan increíble volver a verla en persona después de años de vernos por videollamadas.

Corrí a abrazarla antes de que me diera cuenta. Se sentía tan bien volver a hacerlo.

_Abuela_susurré levemente.

_¿Pero qué tenemos aquí? ¿Alguien ha estado comiendo muy bien?_ tenía una sonrisa en el rostro que me encantaría recordar siempre.

_¿Qué dices abuela? Esto no se debe a la comida, se debe a que soy extremadamente bello_Mi tono de burla sobresalía, a lo que ella rápidamente respondió con un manotazo leve en mi espalda.

_ Si si como digas_ Miro hacia la puerta y encontró parados a mis padres esperando para abrazarla.

Su relación se ha distanciado bastante desde que nos fuimos, pero tal vez si ellos pusieran de su parte volveríamos a ser la familia feliz de antes.

_Hola hijo

_Hola madre, me alegro de verte mejor._ su tono parecía sincero.

_Hola suegrita_mi madre sonrió alegremente mientras mi padre la miraba fijamente.

-Hola cariño_ mi abuela parecía contenta de que al fin nos volviéramos a ver.

Este iba a ser un verano interesante...

________________________________________________________________________________

_¿Qué como que nos vamos? Se supone que acabamos de llegar._no me lo creía, acabábamos de poner un pie en la casa de la abuela, era tal y como la recordaba, tenía ese aroma a vainilla y una brisa que refrescaba de todo calor, amaba este lugar...

_ Como escuchas Cameron_la voz de mi padre era como si quisiera quedarse, pero tenía ciertas ¨obligaciones¨ por hacer Tu abuela está en mejores condiciones y nosotros necesitamos volver a Madrid o sino perderemos el comprador de la propiedad.

_Venga papa hace años que no venimos a Port Fairy_hice una pequeña pausa_No quiero irme ahora, no quiero irme hoy, por favor, quedémonos unos días más _Dije casi suplicando, cosa que si no fuese de vida o muerte no haría, lo odiaba.

Sabía que diría que no, siempre había una excusa y aunque en el fondo él deseaba tanto como yo quedarse, el negocio iba por encima de la familia.

Justo cuando estaba a punto de decir que NO...

_¡Ay, ay!_ exclamo la abuela, pegándonos un susto de los gordos a todos, mientras se dejaba caer en el sillón del salón.

_¡Madre, madre! ¿Estás bien?_dijo mi padre preocupado, mientras mi madre se acercaba a sujetarle la mano.

_No querido_dijo ella con la respiración cortada_No me siento bien_añadio dejándose caer en el respaldo del sillón bruscamente _¿Por qué no se quedan conmigo hasta que me sienta mejor, eh?

_Madre_mi padre frunció el ceño y se le quedó mirando con una mueca_¿Este es otro de tus numeritos?

_¿Le estás diciendo a tu madre dramática?_su semblante cambio rápidamente a uno enfadado, claramente actuado.

_No, no, no madre_ ¿mi padre nervioso? Uy la que se va a liar.

_Yo espero que no pienses dejarme sola_le reclamó

_Madre no me puedo quedar_su mirada estaba dirigida al suelo, justo como cuando regañan a un niño pequeño.

_¿Y quién dijo que quería que te quedaras tú? Hablaba de Cameron idiota, tú vives para tu dichoso trabajo_gruñó.

_¿Cameron?_ pobre de él, yo y mi madre solo podíamos reírnos a carcajadas.

_Pues claro, ya que se marchan ustedes déjenme a mi niño, después de todo estamos en verano.

_Madre Cameron es una responsabilidad y él..._ fue interrumpido por el comentario de Juliana.

_Venga ya, Cameron es todo un hombre, además se portará bien eso te lo aseguro.

_¿Entonces que me quedo?_dije con la esperanza de que fuera un sí.

Mis padres se miraron fijamente y al parecer hablaron telepáticamente, porque ninguno dije una sola palabra.

La habitación estaba en un silencio que rompió mi madre al cabo de cinco eternos minutos para dar la esperada respuesta.

_Te quedarás sí.._No la deje terminar antes de eso ya los estaba abrazando fuertemente y dándoles las gracias_Dejame terminar Cameron_dijo feliz al verme contento_Te puedes quedar siempre y cuando no le des dolores de cabeza a tu abuela y prometas no meterte en líos gordos_Asentí rápidamente, no podía creer que me quedaba al fin.

_Bien hecho mamá, lo conseguiste, Cameron se queda_dice mi papá con tono de vencido.

_ Sabía que no te podrías negar a mis encantos, querido hijo_su tono era demasiado burlón.

_Si mamá, como tu digas_la sonrisa se asomaba en su rostro.

El verano comenzaba de maravilla... Luego de comer, el resto de la tarde estuvo tranquila, mis padres tenían acordado pasar la noche aquí y luego tomar un vuelo directo hasta Madrid, en donde se quedarían un tiempo para vender su última propiedad adquirida.

Juliana cocinaba junto a mi abuela su especial gombo casero que quedaba como para chuparse los dedos mientras mi padre veía la televisión con su amigo de la infancia. Mi madre estaba sentada junto a la ventana leyendo unos de sus libros.

Todo estaba tan tranquilo, solo había un pequeñito problema, NO TENÍAMOS WIFI, era temporal hasta que el técnico que mi abuela contrataba siempre que ocurría esto viniera a la casa, pero aun así, no es que mi vida social sea la más interesante, pero tengo reputaciones que mantener en las redes.

Mi nudo de pensamientos se cortó en el momento en que tocaron el timbre, cuyo ruido se escuchó repercutiendo por toda la casa.Sabía que tendría que abrir la puerta yo, nadie hacia el mínimo esfuerzo en hacerlo, por lo que, con los deseos por el suelo me dirigí hacia la puerta para abrirla a continuación.

Para mi sorpresa ¿Era el cartero?

_Hola_dije amablemente.

_Vive aquí el señor Anderson_dijo mientras revisaba su agenda y mirándome con cara de duda y cansancio.

Al ver que no respondió solamente me entrego la carta y se marchó. ¿Me acaba de dar una carta? Será del ayuntamiento o del hospital. En ese momento no le di importancia, solo me preguntaba ¿quién era el señor Anderson?

_Abuela, te ha llegado una carta_Grite esperando a que viniera a tomarla.

Mi abuela se limpió las manos en su delantal y fue rápidamente a mí .Cuando la tomo entre sus manos hizo una mueca y me dijo_No sé porque me siguen llegando cartas de esta dirección. Claramente, no son para nosotros.

_¿Conoces a algún señor Anderson? Dije recordando el apellido que menciono el cartero al dejarme la carta entremanos.

_No que va, jamás había oído ese apellido_su tono parecía seguro. ¿Entonces quien era el señor Anderson?

_Abuela antes mencionaste que habían llegado más cartas como estas. ¿Dónde las tienes?_ ella me miro y me señalo el cajón que había en la mesita que sujetaba el teléfono de la casa.

Habían 4 cartas y con esta última recién llegada 5. Todas con la misma dirección y el mismo día solo que de diferente mes. Al parecer las habían comenzado a enviar a mitades de primavera.

_Abuela ¿Por qué no las has abierto?_ pregunte dudoso.

_No lo sé cariño, tenía la esperanza de que las vinieran a reclamar o que las mandaran por error.

_Claro, entiendo_hice una pausa y la mire a los ojos

_Puedes abrirlas Cameron si es lo que me ibas a preguntar_me conocía perfectamente, la abrace y ella se fue a terminar la cena con Juliana, sentía la necesidad de ver el contenido de las cartas y ver porque llegaban una vez al mes y aunque abrir un correo que no era para ti era ilegal y ano había vuelta atrás. 

Cuando abrí la primera tenía la fecha del 5 de marzo. Y decía:

Hola Kevin... Que tal todo Apuesto lo que sea a que te estarás preguntando por qué te escribo en vez de mandarte un mensaje como las personas normales, jejeje, bueno déjame decirte por si no te ha quedado claro que:No soy una persona Normal, simplemente me aburría, pero hay algo que debo decirte, nos conocemos hace muchísimo tiempo y te tengo la confianza suficiente como para contarte que, ¡Estoy Enamoradaaa!_ hice una pausa mientras leía_Diciéndolo así parece que se acaba de ganar la lotería, madre mía chica no sabes lo que dices_solté una sonrisa agria, para seguir leyendo_Bueno la verdad es que lo conocí hace unos meses en la feria del inicio de primavera y me pareció un chico muy mono, me pidió mi número y hasta me dijo que era guapa, madre mía, imaginatelo, un chico diciéndome (guapa)_Por dios amiga ni que fueras el monstruo del Lago Ness, seguro te le pareces, pero no creo que lo superes_ solté una carcajada y seguí leyendo_ Bueno el caso es que me ha invitado a salir y como sé que andas castigado sin salir y sin móvil desde que llegaste a las 4 am de tu última fiesta me apetecía contarte, ya te diré como me, fue mientras tanto pórtate bien...

Te quiere muchísimo....... Olivia.


¿Soy yo o parece que me acabo de leer el diario de un adolescente esquizofrénica? Madre mía es la primera carta y esta chica no me puede parecer más ¿rara?

Olivia, Olivia, Olivia no sé quien eres, pero claramente hay un psicólogo esperando por ti, cariño.

________________________________________________________________________________



Tu Ultima Carta De AmorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora