El mensaje en la pantalla fue como un puñal en el corazón. No lo esperaba y a pesar de no tener un nombre asignado aquella combinación de dígitos estaba grabada en lo más profundo de su mente. Tantos años después, incluso con todo el esfuerzo que hizo por eliminar aquel recuerdo innecesario, cada uno de los números que se veían en su celular le generaba una incomodidad y dolor tan fuerte que ardía. Tenía miedo, estaba asustado, no quería si quiera borrar aquella notificación por el pánico de que por error el mensaje se abriera. Tanto era su terror que el mensaje parecía estar duplicado, casi completando la pantalla.
El alrededor enmudeció y se volvió negro, no se sentía acompañado ni escuchaba siquiera alguna respiración que lograra llevarlo de nuevo al presente. Un zumbido era lo único que podía percibir, creía saber quiénes eran porque sabía dónde estaba pero por más que lo intentara no lograba verlos ni escucharlos con claridad. Las lágrimas en sus ojos aún sin caer crearon una cortina incómoda que no quería romper en un vano intento por evitar que se dieran cuenta de su estado.
──Cuti...──su apodo fue un murmullo que apenas acarició su oído. No logró distinguir quién era la persona que lo llamaba cuando todo se terminó de oscurecer.
• • •
Nina se encontraba junto a Lisandro, de rodillas sobre la silla, coloreando un libro con dibujos de animales que él mismo le había obsequiado. Los gatos en las páginas era de distintos colores, incluso se podía ver uno pintado hasta los bigotes de color rojo. No pudo evitar soltar una carcajada cuando ella señaló un garabato negro, que según su mente, representaba a Pipa. Frente a él Alexis la miraba con atención mientras, contrario a lo que hacía la nena, pintaba con mucho cuidado y prolijidad el libro de mándalas que su cuñado había llevado para él.
──No sé qué sería de mí sin vos, Licha. ──dijo Lautaro mientras se sentaba en la cabecera de la mesa y colocaba sobre ella el equipo de mate. ──Gracias por traer cosas para entretener a los dos nenes.
Ambos se rieron mientras Alexis y Nina seguían concentrados en sus dibujos. Habían trabajado sólo hasta el mediodía, por alguna razón sus jefes les habían dado el resto del día libre, cosa que les llamó la atención más que nada porque si fuera por Scaloni trabajarían de lunes a lunes casi sin descanso.
──¿Le mandaste el mensaje? ──preguntó Lautaro mientras le alcanzaba un mate a su primo.
──Sí, sí, pero todavía no me respondió. ──Lisandro y Cristian habían estado hablando como de costumbre durante todo el viernes y la mañana de hoy pero por alguna razón, después de un mensaje, el falso Chiqui Tapia dejó de responder. ──Seguro iba a comprar algunas cosas para mañana, hoy trabaja así que lo más probable es que cuando vuelva me responda y se vaya a dormir.
──Capaz pensó que le ibas a cancelar.
──Y, después de todas las pálidas que me tiraron hoy en la carni si yo no estuviera seguro de lo que quiero capaz que hubiera dudado.
──Uy él, el seguro de lo que quiere...──lo gastó Lautaro mientras se comía un bizcochito de grasa. ──Cucha, ¿qué vas a llevar? ¿el postre, bebidas, más comida?
──Es que quería hablar justamente de eso con él, por eso le dije que nos veamos. Iba a pegarme una escapada a Creed temprano para hablar mientras no está lleno. Pasa que quiero caerles bien a todos viste ──agarró el mate nuevamente──. Va a estar su abuela, sus amigos, Julián que es como su hermano e incluso su mamá que es como la tía de Cris. ──dio un sorbo largo──Es una oportunidad única.
──¿Vos estás seguro de que queres esto? ──preguntó seriamente Alexis.
──¿Vos sos sordo aparte de mufa? ──su cuñado soltó los lápices y le enseñó el dedo medio mientras que con la otra mano hacía una pared para que su hija no viera el gesto. Lisandro y Lautaro solo rieron. ──Sí estoy seguro. Siento que no estoy para las boludeces de ida y vuelta de pendejos. Me gusta, quiero conocerlo, conocer a su gente. No hay que olvidarnos de que él ya compartió con ustedes si bien no fue como hubiera querido──todos recordaron el momento tenso con Rodrigo── lo hizo, interactuó con mi familia. Quiero que sepan que no me tomo esto como un juego, que él me gusta y que quiero ver a dónde nos lleva el vínculo que estamos formando. Quiero que quede claro que no lo quiero lastimar o hacerle daño. Algo me dice que tuvo malas experiencias y quiero que lo nuestro, salga como salga, sea una buena anécdota.
ESTÁS LEYENDO
carnicero | ( cutilicha )
FanficCARNICERO | Un descuido de Nicolas que pudo haber terminado a los bifes terminó de la mejor manera. Esas cosas del destino que se sienten como flechazos, los extraños brazos que abrigan como el calor del hogar que se tuvo toda la vida o aquel que fa...