My Life With Alex Walter | A.W

Capítulo 5

05. Reglas en la casa Walter

Bee había tenido días pesados últimamente. Adaptarse a la nueva escuela le estaba siendo ligeramente difícil, tantas tareas y proyectos por hacer. No supo por dónde empezar. Además de eso, estuvo pasionalmente enfocada en Teatro y realizó la audicion de las porristas, que posteriormente quedó.

No tenía tiempo ni para respirar.

En la casa Walter, no había mucho que contar. Todos estaban centrados en su propio mundo y como Bee casi no estaba en casa por la clínica y el colegio, no podían compartir suficiente con ella. Era como si no existiese un miembro más en la gran familia. Llegaba tarde a cenar y se marchaba temprano. Ni siquiera dependía de Alex para que la lleve, no quería molestarlo tan temprano o tan tarde.

Hasta que un día, exactamente dos semanas después de la llegada de Bee, Katherine los juntó a todos en el comedor y elevó la voz para anunciar una... advertencia.

—Chicos —les llamó la atención, un par de veces— George y yo queremos anunciarles algo.

Bee elevó la cabeza, dejando de pintar con Parker. Y Alex en ese momento, entró a la casa después de un ocupado día en la granja, era sábado.

—¿Sí? —Cole enarcó una ceja dejándose caer en el sofá. Estaba vestido con su ropa de mecánico y tenía la cara y las manos sucias, gesto que Katherine desaprobó de inmediato pero no dijo nada.

—Eh... —George no sabía por donde empezar, le era incómodo tratar estos temas— Con Kathe, quisimos aprovechar que están todos para avisarles de la decisión que hemos tomado tras la llegada de Rebeca.

Bee frunció el ceño, de pronto ella se había visto implicada. ¿Había hecho algo? No, definitivamente. Bee era todo, menos problemática. Un poco hiperactiva, quizás. Pero sabía tener límites.

—¿Qué sucede, tía? —inquirió Isaac, comiendo un pan con mermelada.

—Bee, cariño —Kathe miró a la morena, apenada— Qué sepas que tu no tienes nada que ver con ésto, es solo una simple... prevención.

—Vale —Bee no entendía nada.

—Ya, suéltenlo —Cole bufó, apoyándose en la pared.

—Bee es familia y... así debe mantenerse —el Sr. Walter tomó la palabra. —Eso quiere decir que...

—No la vean como una chica más, veanla como su hermana —aconsejó Kathe, con seriedad— Tienen prohibido relacionarse con ella de otra forma que no sea hermandad. ¿Lo han pillado?

Isaac y Lee arrugaron las narices, casi ofendidos. Cole en cambio solo soltó una risotada y Alex se mantuvo serio, de inmediato supo a que venía ésto.

Bee se sonrojó.

—Es como una prima —Nathan sonrió, simpático— No la veremos de otra forma, de ninguna manera.

—La cuidaremos y protegeremos como nuestra hermanita —Isaac asintió, golpeando a Lee para que esté de acuerdo.

—Exacto —murmuró su hermano.

Kathe y George miraron a sus hijos mayores, a Alex y a Cole.

El rubio sonrió burlesco.

—Yo no tengo ningún problema —se hizo el inocente— ¿y tú Alex? Digo, eres el que tiene más experiencia en eso...

—Cállate —Alex se levantó, dispuesto a enfrentarlo pero su padre se puso en medio.

—No discutan —ordenó, serio.

—Papá, ésto es ridículo —Alex estaba furioso— Ella no es Jackie —señaló a Bee— Y no voy a enamorarme de cada chica que traen a la casa. ¿Están dementes?