Yo, la patria, hago lo que quiero(Parte 2)

Cap 292

  Congresista, casa de Victoria Newman.

  El dormitorio que acababa de terminar una gran pelea se veía un poco caótico, Victoria estaba sentada en el borde de la cama, fumando un cigarrillo.

  Azu admiraba su espalda, para ser madre, la figura de Victoria era bastante buena.

  Exhalando una bocanada de humo, Victoria se dio la vuelta y dijo con una sonrisa: "¿Está satisfecho con el servicio de ahora? Señor".

  Azu sonrió y dijo: "Está bien, pero tengo curiosidad, no parece estarlo". resistiendo mucho más."

  "¿Por qué debería hacerlo? Resistencia."

  Victoria se inclinó más cerca de Azu: "Nadie más puede darte ese tipo de felicidad. Apuesto a que mientras sepan lo bueno que eres, ninguna mujer en el mundo puede Rechazarte".

  Azu asintió y dijo: "Esto es lo que me gusta escuchar".

  "Dígame algo serio". "¿

  Ha visto a Wilson recientemente?"

  Victoria arqueó las cejas: "¿Señor ex ministro?"

  "No, él "

  Parece que la federación tiene la intención de dejar que se desvanezca del ojo público".

  Azu se rió entre dientes: "Ese viejo zorro no puede renunciar tan fácilmente. Cuanto más discreto seas, más problemas tendrás". ."

  "No quiero perder el tiempo con él."

  "Victoria, ¿qué tal si me haces un favor??"

  Dijo algo al oído de la mujer.

  Los ojos de Victoria se abrieron de repente y estaba a punto de decir algo, pero Azu no le dio la oportunidad de decirlo.

  en la sala de estar.

  La alta Cindy sacudía la cabeza y los gritos de las mujeres seguían llegando desde arriba, lo que mantuvo sus oídos en silencio por un momento.

  En ese momento se abrió la puerta y entró una niñera con una niña.

  Entró Zoe, la hija de Victoria.

  Al ver a Cindy, se escondió detrás de la niñera con algo de miedo.

  Cindy le sonrió: "No soy mala persona".

  Por supuesto Zoe no le creyó tan fácilmente. De repente escuchó el llanto de su madre, y la niña dijo nerviosamente: "¿Qué pasa, mamá?"

  Estaba a punto de corre al dormitorio.

  Cindy la abrazó rápidamente y la consoló: "No te preocupes, tu madre está bien."

  Zoe no lo creía, por lo que Cindy no tuvo más remedio que llevarla en brazos al jardín.

  Más de una hora después, Cindy vio salir a Azu y le dijo: "Vamos, Cindy".

  "Juguemos la próxima vez", le dijo Cindy a la niña.

  Azu llevó a Cindy, tomó un taxi y regresó a Chinatown.

  Colocó a Cindy en el edificio de apartamentos y regresó sola a la Torre de los Siete.

  Al entrar a la sala de mando, Azu escuchó a Ashley hablando por teléfono.

  "No, no más."