Srta. Older (Michaeng G!p)

I.

Una pequeña tigrecita de 12 años le había prometido a su profesora de primaria, Myōi Mina, que cuando fuera mayor ella sería su esposa, su profesora dudó sobre la propuesta de la pequeña pensando que era broma.

Después de años, Chaeyoung regresa a Corea siendo toda una tigre mayor de 20, lista para iniciar la universidad.

Myōi Mina se había convertido en una profesora de Seoul National University, una de las mejores universidades que el país podía ofrecer después de volver a estudiar una especialidad en historia.

Al principio del semestre Mina se había ausentado por problemas familiares dejando a Lisa, su compañera de trabajo a cargo de sus clases con los de primer semestre.
Al termino del semestre Mina volvió al mando solo para entregar las calificaciones de sus alumnos.

Encontrando un pequeño problema en cierta estudiante..

—Son Chaeyoung— ¿Se trataba de esa pequeña amante de las fresas que había educado tiempo atrás? Talvez no.

O talvez si.

—Presente, Srta. Myōi— Una cabellera rubia se levantó camino a su escritorio.

Era una joven de no más de 20 años, tenía tatuajes llamativos adornando sus brazos, su vestimenta era descuidada pero no la hacía lucir mal.

—Señorita Son, me temo informarle que reprobó mi materia— el lunar que tenía cerca de la boca...
Ese lunar lo conocía de una parte.

—¿Qué podría hacer para pasar? Esposa mía— Enserio era ella...— ¿Le refresque la memoria o tengo que recordarle más cosas para que me reconozca?— deladeó una sonrisa mientras ponía ambas manos en el escritorio, presionando la madera de este.

—Son Chaeyoung... Un gusto volver a verla— mi mente me traicionó al hablar, Dios.
Se veía tan bien, tan linda, tan...

Madura.

—Podremos conversar sobre su promedio al termino de la clase señorita, al parecer fue la única que no obtuvo ni la mínima para pasar mi materia— respondí despegandome de mis lentes dejándolos en el mismo escritorio.

—¿Y por qué no ahora profesora?, ¿Acaso hay algo más que quiera hablar?— ¿Así era desde que se hizo una adolescente madura? Que directa e irrespetuosa.

—Le recuerdo que seguimos en clase, solo detuve la clase para darles sus calificaciones pero seguiremos trabajando, le pido que vaya a su asiento, ya hablaré con usted al terminar la clase.— Volví a ponerme mis lentes y acomodé los mechones de cabello que estaban sueltos en mi rostro viendo como Chaeyoung regresaba a su asiento con una sonrisa y se mordía ligeramente los labios.

Volví a la pizarra a explicar el tema que estábamos viendo.

“Caida del imperio Romano” mi favorito.

Después del toque del timbre todos se levantaron de sus lugares y salieron, exepto ella.
Después de que diera una rápida mirada para según yo, asegurarse que nadie la viera se acercó a mi asiento, no si antes cerrar la puerta.

—¿Acaso me va a extorsionar para que la pase? Porque sé defensa personal si piensa hacerlo.— advertí mientras me recargaba en el escritorio.

—No es eso profesora, solo no quiero que nadie se entere que reprobé una materia fácil.— se detuvo a unos pasos de mí.

—Bien señorita Son, espero que haya puesto atención al tema de hoy y explíqueme el porque reprobó, mi compañera me comentó que usted casi no entraba a clases y si lo hacía, no realizaba nada de las actividades o las hacía de mala gana.— me arremangue las mangas de la camisa.

—No tenía ganas de entrar, fácil y sencillo— dejó caer su mochila al suelo— Dígame que tendría que hacer para pasar, no puedo reprobar ni una materia, se lo juro— estaba jugando con uno de sus anillos, pero no se veía nada nerviosa como para que juegue así con ese pedazo de metal enroscado en su delgado dedo.

—Tendrá que traerme un reporte general de todo lo que vieron este semestre y pasará a exponerlo, veamos si así se le quitan esas ganas de faltar a mis clases ahora que yo estoy presente.— mi mirada se había vuelto pesada.
No iba a dejar que ningún estudiante se refiera a mi clase de esa forma.

—Ahora lo que me interesa a mí— se fue acercando a pasos cortos a lo que eleve levemente una ceja— ¿Me recuerda, Srta. Myōi?

—Lo hago Son, pero no pensé volver a verla si le soy sincera, han pasado tantos años desde que la ví fingir ser un tigre amante de las fresas.— ablande mi mirada pero seguía con la guardia alta, una nunca sabe si el alumno tiene un cuchillo en el pantalón para clavarselo en la yugular.

—Si me recuerda a mí, supongo que recuerda lo que dije hace 9 años, ¿Cierto?— su mirada en mí era atenta, igual que la de un depredador a su presa.

—Eras una niña muy risueña en ese tiempo Son, siempre supuse que lo decías en broma. Eras muy pequeña como para tomarte en serio.— sin darme cuenta, estábamos frente a frente mientras sentía su respiración golpear mi cara aunque fuera más baja que yo, llevaba botas que le regalaban unos centímetros de más.—

—Me alegra que lo recuerde— puso sus manos contra las mías, haciendo que empezará a reclinarme en el escritorio mientras nuestras miradas chocaban.— Ahora que me ve más de cerca, ¿Le sigo pareciendo pequeña, señorita Myōi?—Susurró en mi oído, alejándose de a poco.

Sentí un bombeo en mi entrepierna al sentir lo cálido de su voz cerca de mí.

—Tendrá mi reporte el lunes que viene señorita Myōi, tenga linda tarde— cuando pude reaccionar ya iba camino a la puerta.

Me dejó con el corazón latiendo a mill por hora y una sensación rara entre mis pantalones.

Mi pequeña tigrecita loca por las fresas, ahora era todo un tigre...

Listo para devorarme en cualquier momento.

🐯// 🐧👓

Por petición del tistos ando haciendo esto.

Pero ya en buen plan, ¿Qué les gusta de esta temática romance alumno/maestro? Me intriga.

—CassByJauregui🍃