MI MAS GRANDE ANELO ES UNA VIDA A TU LADO / yuuta okkotsu

🪷Shibuya🪷

Diez de la mañana/Sábado XX/XX/XXXX

Mis gemidos combinados con los de yūta inundaron la habitación, no sabía cuanto tiempo llevábamos en esto, pero no me quejo

Sus manos apoyadas en mi cintura mientras me embestía tratando de ser lo más delicado posible, pero el desespero del momento se lo impedía

Mordí mis labios para no seguir gimiendo por miedo a que nos describieran ya que estaba contra las reglas tener sexo en las habitaciones de la academia

Yūta bajo una de sus manos hasta mi cadera y la apretó con fuerza, dejando sus dedos marcados mientras seguía golpeando contra mí

Sus leves gruñidos se transformaron en gemidos mientras se enderezaba, aún entre mis piernas, soltó un momento mi cadera y se llevó la mano al cabello, acomodando su cabello hacia atrás

-Mhh... No sé si pueda seguir por más tiempo... —su voz gruesa y entrecortada gracias a la excitación del momento—

Mientras yo trataba de no gemir, se me hizo imposible cuando él tomo mis piernas y las coloco sobre uno de sus hombros, si soy sincera, nunca espere que Yūta supiera tanto del tema... El viaje a Estados Unidos lo cambio en muchos aspectos

Pero... Como llegamos a este punto? Les cuento que pasó

Yūta siempre estuvo conmigo, luego del acontecimiento del 24 de diciembre donde volví a ver a Suguru estuve muy mal, ver al chico que fue mi padre, mi hermano y mi mejor amigo, atacando a mi escuela, a mis amigos y también atacandome a mi fue un golpe duro emocionalmente al igual que su muerte

Me refugie en mi habitación, llorando por días, su presencia aún dolía y no era capaz de superarlo, me preguntaba a mi misma: ¿Que fue lo que ocasionó que el pensará así? Simplemente no lo entendía

Días después de lo acontecido, yūta fue a mi habitación, me dijo que lastimosamente tenía que irse a entrenar a Estados Unidos por el bien suyo y de los demás, eso también hizo que mi mundo cayera en picada

No solo perdí a Geto, sino que también iba a perder a mi novio, yūta me consoló diciendo que en las vacaciones vendría a la academia para visitarme y que íbamos a mantener en contacto, yo acepté ya que sabía que era lo mejor para ambos, rogando que algún día podamos volver a estar juntos...

Cuando llegamos al aeropuerto para despedirme de él, mis ojos se cristalizaron mientras lo abrazaba, sus ojos negros también se cristalizaron mientras me abrazaba con todas sus fuerzas

-No se preocupen, par de tortolitos, en vacaciones pueden volver a verse... Siempre y cuando el uno no se olvide del otro —las palabras de Satoru-Sensei sirvieron de alivio momentáneo, yūta me beso por última vez antes de subir al avión—

Entre más pasaban los días, más lo extrañaba... Aunque, en las noches hacíamos videollamadas, el me contaba como iba todo, me mostraba su nueva academia y todos los lugares que el adoraba

Unos días después, dejamos de hacer videollamadas, solo escuchábamos nuestras voces mientras reíamos y hablábamos de temas triviales

También le contaba que había nuevos estudiantes, le conté que ellos eran bastante agradables y divertidos, también que eran muy fuertes y tenían potencial

-Es lindo saber eso, linda... —la voz de yūta era distinta, su tono era más firme y mucho más grueso de lo que recordaba—