Parte sin título 6

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Ha pasado mucho tiempo desde que desperté, y finalmente ha llegado en gran día o, ¿debería decir el temible día?. Hoy es el día, hoy me darán de alta, hoy dejare de verlo, dejare de escuchar su dulce voz, de ver sus claros ojos.

Estoy triste y siento ganas de llorar. Es de mañana, pasaran a penas de las ocho, el día esta nublado y brumoso, que mejor día que este para salir, ¿no?.

Anibal no ha venido ni una sola vez, debe estar muy ocupado o tal vez aun no ha llegado... quiero verlo, quiero escucharlo, quiero que me diga que este no es el final, que nuestra historia acaba de comenzar... nuestra historia ¿eh?, ¿sera acaso que existe una historia?, me he enamorado de él, el tiempo que he pasado a su lado me ha dado las fuerzas para querer seguir adelante, para re descubrir mi pasado y para desear un futuro.

Escucho pasos, alguien se acerca, cubro mi cara con las sabanas, espió por debajo de estas...

- Anibal!!! - me cubro la boca,me mira desconcertado, detrás de él vienen mas personas - disculpe doctor Adadia - me disculpo de inmediato, parece ser que nadie se percato de la forma en que lo llame, aparte de él entran tres personas mas, incluida mi... madre, se acercan despacio hacia mi, los miro impacientemente, comienza a hablas el más anciano.

- Buenos días señorita, ¿como amaneció hoy? - lo miro y asiento con la cabeza- me alegra. Su recuperación física ha ido mejor de lo que esperábamos, su cuerpo ha sanado completamente y a excepción de  su memoria no encontramos mas problemas por lo que hemos decidido darla de alta hoy mismo - al escuchar tales palabras mis ojos se dilatan y emito un ruido sordo, miro suplicante a Anibal, espero que diga algo, no habla, miro a los demás y murmuro:

- entonces - todos me miran - ¿a donde me van a llevar?- bajo la mirada, espero su respuesta

- a casa por supuesto, todos están esperando - levanto la mirada, esta llorando, la mujer esta llorando (mi madre), bajo la mirada una vez mas, suspiro y miro una vez mas a Anibal, no ha dicho una palabra, se mantiene en silencio al lado del anciano.

- si no hay mas preguntas, entonces emitiré la orden de salida para que la señorita Altair Vega abandones las instalaciones medicas hoy mismo - el medico anciano se despide y se retira primero, una enfermera lo acompaña, la mujer (mi madre) se acerca despacio y me abraza, no respondo, suelta mi cuerpo suavemente y me besa la frente.

-Espera un momento mi amor, iré a arreglar el papeleo para que vayamos a casa - se levanta, seca sus lagrimas y se dispone a salir...

- Espere un momento por favor.

La voz de Anibal me saca de mis pensamientos.

- Por favor, ¿podría hablar con usted un momento?

- ¿Sucede algo doctor?

- Nada grave, solo me tomara unos minutos, por favor acompáñeme - los miro alejarse, ¿me pregunto que es lo que hablaran, la mujer parece sorprendida, Anibal conserva la calma, continúan hablando, de pronto ambos voltean a verme y al instante la mujer niega con la cabeza, comienzan a subir la voz "es mi hija, quiero que regrese con migo" alcanzo a escuchar, Anibal trata de tranquilizarla y la dirige a otro lugar. No pude saber lo que hablaban, pero al parecer Anibal cree que aun no estoy lista para abandonar el hospital, ¿sera acaso que lo hace por lo que le dije la ultima vez?.

Tras unos minutos, Anibal regresa solo.

- ¿Sucede algo? - pregunto inquieta, se acerca despacio y me regala una sonrisa.

- La convencí, logre convencerla - sonríe una vez mas, lo miro atónita.

- ¿ la convenciste? - pregunto confusa.

En algún lugarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora