Aquella noche acariciaste mi pelo y me hablaste de nuestro futuro,
Asentí y pensé en lo felices que seríamos, juntas.
Me diste la mano y tuve por primera vez en mucho tiempo, la sensación de estar en casa,
De haber encontrado mi sitio en el mundo.
Pero como siempre, como todo lo que me rodea, desapareciste, y contigo te llevaste mis sueños,
Mis sonrisas...
Eras todo para mí,
Eras cada maldito paso,
Cada suspiro,
Cada latido.
¿Y que soy yo ahora sin ti?
Más que a todo.