◇Tócame◇

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Levi es un hombre de pocas palabras. Pero haría lo que fuera para asegurarse que su punto de vista era entendido. Ya sea en amor o en odio...
En esos momentos se encuentra en su oficina aprovechando su tiempo libre para arreglarse,tendría una junta en unos cuantos minutos así que arregla su cabello. Unos golpesitos a su puerta hace que preste toda su atención a la persona.

-¡Hola Hola señor ackerman -esa joven muchacha entra y se pone de pie frente al escritorio de levi mientras que él no se molestó en acercarse a ella.

-¿Qué deseas?-- su voz era fría y seca.

-un besito- la joven responde en broma,levi chasquea su lengua aún viéndose en el espejo y peinando su negro y suave cabello.

-Yo no doy besos a extrañas-levi responde en su mismo tono,esa era su marca registrada.

-Ese es mi hombre,eso debes de decir cuando mujeres te pidan un beso- bromea ella sonriente.

-Definitivamente a todas- Levi insiste en su respuesta mientras se sigue mirando a si mismo en el espejo con su afilada mirada.

-Exacto -la joven deja unos papeles en el escritorio de su jefe-- el señor smith le envía esos documentos para que los firme.

-Está bien, lo hago en seguida- Levi dice mientras su mirada se vuelve más fría, lo que hace que resulte aún más escalofriante dado lo afilado de sus ojos.

-No me mire así -sonríe desviando su mirada de su jefe.

-Yo miro como yo quiera- Las frías palabras de Levi resonaron por su oficina.

-Uff,amo cuando es usted así- Ríe una vez más y apoya sus mandos en el escritorio de levi.

-¿Qué te causa tanta risa?- La voz fría y tranquila de Levi retumba en su oficina mientras este sigue viendo su reflejo en el espejo y se empieza a arreglar el pelo.

-De lo Exageradamente frío que es usted.

-¿Yo?-Levi dice. Los ojos se levantan de su reflejo y se fijan directamente en la muchacha-Si soy exageradamente frío, es porque esta es la manera como soy.

-Me gusta- responde. La forma de ser de su jefe no le afectaba en lo absoluto,era tan masoquista que en vez de molestarle o incomodarla,le fascinaba.

Levi decide quedar en silencio mientras sigue arreglando se frente a su espejo.

-Y ahora se queda callado.

-No veo razón alguna por la que tendría que estar haciendo conversación contigo cuando se supone que deberías estar trabajando.

-lo mismo digo,pero estas arreglando tu cabello.

-Lo que hago o no hago con mi cabelló en mi propio tiempo libre no te importa-Levi dice, su tono se vuelve más serio al decir eso.

-¿Ya le dije que me encanta su comportamiento frío y autoritario?- la dulce voz de la joven sonaba tan pacífica.

-Si, lo haces continuamente-Levi levanta su mirada de nuevo hacia la joven. Su discurso es igual de afilado como su mirada.

Sonríe ella y relame sus labios acomodando su vestido,voltea y camina hacia la puerta.

-Bien,volveré con mi trabajo.

-Dejame adivinar. Regresarás en algún momento para pedir algo más o solo para fastidiarme.

-Quizás vuelva en una hora solamente para fastidiarlo.

-No sé como soporto estar cerca de ti por más de dos minutos-Levi dice en tono sarcástico.

-Algo debo de provocar en usted-bromeó acercándose otra vez al escritorio.

Historias cortas [LEVI ACKERMAN]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora