⭐-𝘛𝘩𝘳𝘦𝘦

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⏤Me sorprende lo mucho que Minho ha mejorado ⏤dijo la señora Choi, caminando al lado de Bang⏤. Y todo es gracias a ti, Christopher.

El nombrado escuchaba a la señora Choi, pero no dejaba de ver a su pequeño Minho, quien se colunpiaba felizmente, mirando a todos lados como un pequeño niño.

⏤No diga eso, todo es gracias a usted ⏤respondió amablemente Bang.

⏤Pero tú también ayudaste mucho ⏤la señora Choi volteo a ver a Minho, quien tenía una sonrisa plantada en su delicado rostro⏤. Minho se ve mucho más feliz desde que te conoció. Llevo años tratándolo, y siempre.. ⏤se detuvo un momento, a lo que Bang la miró⏤, él siempre estaba muy desanimado, se odiaba a sí mismo ⏤se aclaró la garganta⏤. Las personas con ese síndrome suelen odiarse, y nunca dejan de hacerlo. Minho así era, y nunca sonreía al menos que viera libros para dibujar, y helados.

Bang volvió a mirar a Minho. Ahora estaba sentado en el columpio, con una floresita entre sus manos.

>>Pero nunca estaba completamente feliz ⏤continuó, a lo que Chris simplemente soltó un suspiro derrotado. No se podía imaginar a su pequeño Minho triste todo el tiempo⏤. De hecho, antes pensábamos que el tenía.. Retraso.. Ya sabes ⏤no quería suponer eso sobre Minho⏤. Pero no, resultó tener el síndrome de Peter Pan, en pocas palabras, Pueril. Pero lo de él es algo que lo hace comportarse así por nacimiento, por naturaleza.

Christopher había escuchado atentamente todo lo que la señora Choi dijo. Él quería saber más sobre Minho, porque claro este no se lo explicaría tan fácilmente.

⏤Entiendo ⏤susurró Bang, e iba a seguir hablando, pero la señora Choi lo detuvo. Ella sabía que duda le rondaba.

⏤A lo que quiero llegar, es que tú, Chris, has hecho que Minho aprenda más cosas, que se valga por sí mismo, que sepa que es un buen chico. Tú lo haces amarse y cuidarse a sí mismo, porque tú le enseñaste mucho, y le das el cariño que se merece ⏤se levantó, llamando la atención de Bang⏤. Yo espero que puedas seguir estando a su lado, porfavor. Me hace tan feliz ver que Minho es feliz a tú lado.

>>En fin, ya me tengo que ir. No los podré acompañar a casa, así que los veré la siguiente semana.

Le estiró la mano, pero la apartó al ver a la velocidad que Bang se levantó. Parecía enojado.
Volteó a ver a dirección donde estaba Minho, y habían un hombre a un lado de él, al parecer no se traía nada bueno.

Y cuando menos esperó, Chris ya estaba junto a Minho, quien lloraba sin control alguno. Ya estaba acurrucado entre los brazos de Bang, y al parecer este estaba discutiendo con aquel hombre.

Se acercó, pero lo que escuchó no le gustó para nada.

⏤¿Qué? Al final de cuentas es para lo que sirven los pendejos con ese tipo de enfermedades mentales. Para ser cogidos, para ser la puta de uno.

La señora Choi iba a protestar, pero Chris la detuvo, entregándole a Minho para que lo abrazara.

⏤Llevelo hacía allá, ya iré ⏤ordenó Bang, muy molesto, aguantandose las ganas de golpear al hombre frente a él. Pero no lo haría, no frente a su Honnie.

La señora Choi hizo caso y se llevó a Minho a una de las bancas, para así distraerlo. Y Bang, al verlos ya lejos, no esperó más y le propagó un golpe al tipo frente a él. El hombre intentó regresarlo, pero Chris era más rápido, a lo que le volvió a dar uno, pero en el estómago, haciéndolo caer al suelo.

⏤No vuelvas a hablar así de una persona, y menos de mi novio ⏤demandó⏤. Personas mierda como tú no merecen vivir en este mundo.

Y con eso, se fué hacia donde estaba su novio, dejando ahí al tipo ese.

⏤¡Channie! ⏤gritó Minho al ver a su novio acercarse, y corrió directo a sus brazos⏤. Cha-channie.. Ese hombre m-me dijo cosas muy malas, cosas m-muy feas ⏤su voz temblaba, pues aún no podía controlarse.

Bang acarició sus cabellos y dejó un beso en su frente, trataba de calmarlo un poco.

⏤Tranquilo, bebé. Channie ya se encargó de eso ⏤aclaró, acariciando su mejilla⏤. Nadie te volverá a tocar ⏤volvió a besar su frente⏤. Ya no llores, mi amor. Te llevaré a comer helado y a comprar más colores, ¿te parece?

Minho lo volteó a ver, con sus ojitos brillosos de tanto haber llorado. Solo podía aferrarse a la camisa de Chris, y acurrucarse en su pecho. Pero aún así, asintió muchas veces, pues la idea le emocionaba.
Mientras la señora Choi miraba la escena, bastante enternecida que no quería interrumpir. Minho sí estaba en buenas manos después de todo.

Éste no será el final, cuando se me ocurra algo, seguiré actualizandola.

•𝘗𝘶𝘦𝘳𝘪𝘭 ᴹᶦⁿᶜʰᵃⁿDonde viven las historias. Descúbrelo ahora