WINDY SPRING XII

CAPITULO 5

Taehyung se acurrucó en el colchón individual en la esquina mientras observaba a Jin empacar lo poco que poseía, y no había mucho. Hasta ahora, todo lo que había guardado cabía en dos bolsas de lona y no había mucho más que empacar.

—¿Qué haces, Jin?

Jin lo miró. —¿Qué hago?

—Sí, quiero decir, ¿cómo te ganas la vida?

—Oh. —Jin fue a doblar sus camisas y colocarlas dentro de la bolsa. —Realizo trabajo pesado en su mayoría, puedo hacer el trabajo de dos hombres, por lo que a muchos sitios de construcción les gusta usarme.

—¿Cómo te sientes sobre cocinar?

—Sé cocinar. —Jin frunció el ceño. —Más o menos. Mi madre comenzó a enseñarme a cocinar justo antes de morir. Después de eso, fue más desesperación que otra cosa. Mi padre no cocinaba. Lo consideraba trabajo de mujeres.

Taehyung se echó a reír. Sentía divertida la respuesta de Jin. —Trabajo en un restaurante. Soy el cocinero.

—¿Sí? —Jin lo miró de nuevo. El hombre parecía realmente interesado.

—¿Te gusta?

—Oh, sí. —Taehyung sonrió. Le encantaba trabajar en el Windy Spring Diner. —Mis jefes me dejan que me encargue del menú siempre que me asegure de que no haya zanahorias. John Windy odia las zanahorias.

—A mí tampoco me gustan mucho las zanahorias. Estoy de acuerdo con las zanahorias crudas como en ensaladas y cosas así. Son las zanahorias cocidas las que no me gustan. Tienen un sabor extraño, como a plástico caliente.

Taehyung se rio de nuevo. —John solía venir al restaurante todos los domingos antes de conocer a Taeil, que trabajaba allí como camarero. Pasaron por un montón de mierda y Taeil casi muere cuando fue secuestrado por el anterior cocinero. Cuando todo terminó, John compró el restaurante para Taeil como regalo porque Taeil amaba ese lugar.

—Espera. —Jin dejó caer su bolsa en el suelo y se sentó en la única silla en la habitación. —¿Tu jefe fue secuestrado por el viejo cocinero?

Taehyung asintió. —Obviamente el hombre estaba loco, pero estaba detrás del dinero de John. Al parecer está forrado. —A Taehyung no le importaba. No era su dinero, por lo que no le importaba más allá de recibir un cheque por el trabajo que hacía.

—¿Qué le pasó al cocinero?

—¿Lucas? —Taehyung sintió escalofríos sólo de pensar en el hombre. —Murió. John le puso dos balas en la cabeza.

Los ojos de Jin se abrieron de par en par. —Maldición.

Taehyung asintió. —Desafortunadamente, Lucas tuvo un tiro de suerte y alcanzó a Taeil, pero se recuperó bien. Se casaron no hace mucho, y Taeil se mudó a la montaña a la nueva casa que John le construyó.

—Debe ser realmente rico.

Taehyung se encogió de hombros. —Su abuelo fundó Windy Spring e invirtió mucho, así que supongo que lo es, pero nunca conocerás a un tipo más sensato. No tocó ni un centavo del dinero que su familia le dejó hasta que conoció a Taeil y le construyó una casa y le compró el restaurante.

—Si Taeil ama el restaurante tanto como dices, ¿por qué te da tanta vía libre?

—Ama más a John.

Taehyung soñaba con un amor así. Ansiaba tener a alguien que lo amara más que a nada en el mundo. Quería pertenecer, importar. Quería a alguien que le perteneciera sólo a él. Taehyung tragó saliva cuando Jin le sonrió. Tal vez había encontrado a ese alguien.