68.- Un romance interespecie (Gay / Homosexual)

Amenaza (2)

Dejó los papeles en el escritorio y se asomó al espejo, tomó aire profundamente y retiró la capa que cubría su cabeza, una capa larga hasta los tobillos y la dejó caer sobre la cama.

Observó su cuerpo ante el espejo.

Muchos creían que los vampiros no se reflejaban en los espejos. Había ocasiones, cuando el ocaso y las noches oscuras mostraban lo peligrosa que era la noche... que sí lo hacían. Cuando la oscuridad del cuarto era tan profunda que apenas se podía ver a unos pocos centímetros en frente o apenas los ojos de los seres humanos podían acostumbrarse, era el momento perfecto.

Su reflejo mostraba un joven de piel gélida, una piel tan blanca que parecía la de un muerto. Sus ojos grises, con los párpados caídos que parecían iba a caer en un sueño profundo en cualquier momento... Sus manos finas de dedos torpes y puntas rojizas por la frialdad de su cuerpo retocaban sus cabellos azabaches como la noche que caían como una cascada, y enredaban los largos mechones en una trenza frente al espejo... Una trenza larga, tan larga que alcanzaba su pelvis. Acomodó su flequillo, y enrolló la trenza para hacerse un moño que aguantó con una goma de pelo.

Revisó la hora una vez más: Las doce y media pasadas, aún no eran menos cuarto.

Buscó entre sus pertenencias el estuche y una libreta, con eso, se dirigió hacia la salida, agarrando las llaves y guardándolas en el bolsillo izquierdo, el teléfono en el bolsillo derecho. Inspiró profundamente para hacer de tripas corazón, y cerró los ojos al abrir la puerta de su habitación, sus ojos sensibles fueron golpeados por la luz eléctrica una vez abrió los ojos y tuvo que arrugar el ceño... Necesitaba gafas de sol para el interior porque a ese paso sus ojos iban a terminar seriamente dañados.

Recorrió los pasillos después de haber memorizado la localización con el mapa de la carpeta. Varios de los compañeros tenían el mapa en sus manos, lo cual le hizo rodar los ojos y continuar con sus pasos a una velocidad mayor. De hecho, era una de las especies más veloces, y agradecía que la gente no se le pusiera en medio y pudiera avanzar tranquilamente hasta el aula concreta.

Revisó la hora una vez más: Las doce y cincuenta. Podría haberse quedado en la oscuridad de su habitación diez minutos más... Suspiró pesadamente y apoyó la espalda en la pared más cercana, cruzado de brazos. A su alrededor había algunos que, igual que él, esperaban a que iniciara la reunión. En su mayoría eran no muertos o especies de la rama fantasmal...

Hasta que su olfato se arrugó inconscientemente... Un olor a canino le causó una reacción nauseabunda y asqueada. Su nariz se arrugó como la de un canino, y ahogó un gruñido agudo en su garganta.

Un grupo de licántropos aparecieron ante sus ojos grises, uno moreno, ojos canela, cabello azabache, sus orejas y pelaje era denso, su cola era animada, y su cuerpo era fuerte y marcado, pero dentro de aquella tosquedad, había cierta armonía y delicadeza que no tenían los otros licántropos; otro era castaño, un tanto menos moreno que el primero, sus ojos también eran canela, su pelaje era marrón, su cola no se movía tan animada, sus manos eran duras y de aspecto áspero, igual que el resto de su cuerpo, pétreo y desagradable, los otros licántropos tenían un aspecto similar a este, pero eran menos morenos, parecían caucásicos, y en su mayoría castaños y de ojos oscuros.

Torció el labio con desagrado cuando uno de los licántropos se lo quedó mirando, el que tenía la piel más morena que el resto... También era el más alto... Su expresión se mostró curiosa, pero antes de dar un solo paso, sus ojos grises se afilaron y sus colmillos se mostraron como una amenaza, y un sonido gutural, similar a un hisseo se dejó escapar, cosa que hizo retroceder al licántropo el paso que había dado en su dirección.

Había sido una advertencia, la próxima vez probablemente sería una amenaza, aunque parecía haber aprendido la lección solo la advertencia, porque apartó la mirada y su cola se quedó quieta y cayó, intimidado en cierta parte...

Se saltó la comida cuando la jornada explicativa finalizó, total, no tenía sed, y tampoco tenía necesidad de estar en contacto con aquellas personas, tampoco es que hubiera ningún vampiro de su clan en su clase, o de su edad en los otros cursos. Aunque los hubiera, no se acercaría a ellos.

Detestaba mezclarse con vampiros más adultos que él, porque siempre actuaban de engreídos y superiores, cuando claramente solo tenían un par de decenas o centenares de años, le parecía ridículo. Además, no eran de su clan, lo cual implicaba que un hisseo inadecuado o un insulto mal intencionado podrían acabar siendo una guerra sin precedentes.

Lo cual haría que le tuvieran más "cariño" del que ya le tenían en el clan.

Arrugó su labio con desagrado al detectar un nauseabundo olor a perro mojado, tanto que tuvo que cubrir su rostro ante tal desagrado y se giró con una mirada amenazante. Frente a él, se encontraba el licántropo moreno al cual había advertido previamente, y parecía que le había caído una tromba de agua encima, pero resultaron ser las novatadas— no sabía que eso se hacía en ese instituto—, dio gracias a que él no estuvo ahí para ser víctima de nada, porque sino les hubiera arrancado el pescuezo a todo aquel que le hubiera puesto las manos encima.

Su cola se movía de lado y en sus ojos había una gran curiosidad insana que en cierta parte se le hizo demasiado detestable.

- Compartimos clase, ¿No?

- Desgraciadamente...- abrió la puerta de su habitación, visiblemente molesto por su intrusiva tentativa de acercamiento, le gruñó, tentando de alzar el labio para mostrar su colmillo.

- ¿Puedo ver tus ojos más de cerca?

- No.- pasó y le cerró la puerta en las narices.- Maldito saco de pulgas...- gruñó audiblemente, sucumbiendo en la oscuridad de su habitación, el amanecer no penetraba aquellas cortinas, dio gracias a eso.

Al otro lado de la puerta, el licántropo se quedó en silencio, y su cola dejó de moverse, torció el labio hacia un lado.

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Aquí las opiniones ------------>

Espero que os haya gustado, hacédmelo saber con un voto y nos leemos en el próximo capítulo

Bye~

By Silvia Line

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