¿ODIO O AMOR? (Madelaine Petch y tú)

Cap. 34 Es por ti

Narra T/n:

¿Por qué sigo aquí parada? Tendría que irme a casa y no estar en medio de la calle dejando que las gotas de lluvia caigan sobre mi como una idiota.

¿De qué estoy hablando? Claro que no tengo que ir a casa, corrí casi 10 kilómetros para buscar a la mujer que amo, ¿Aquí se acabará mi carrera? ¡¿Dejaré que un pequeño obstáculo me detenga?! Sería más idiota de lo que soy ahora si dejara que pasara.

Volví a correr, igual de desesperada que antes, solo que esta vez pensamientos de como recuperar a Mads rondaban mi mente.

La casa de Mads no estaba tan lejos, por lo que en 20 minutos ya estaba fuera.

Toqué la puerta una vez, mientras esperaba trataba de regular mi respiración, y estar completamente empapada no ayudaba.

Mads: T/n te dije que...

T/n: No Mads -La interrumpí- Tengo que arreglar esto ahora.

Mads: Te vas a enfermar, pasa -Su mirada era triste y parecía ¿Asustada?, no me miraba a los ojos por más de 1 segundo- Ven, te prestaré ropa -Se giró para irse pero en medio salón la tomé de la mano-

T/n: Mads, por favor -Esta vez su mirada se mantuvo en mis ojos- Fui una idiota, y no hay excusa que pueda justificarme, pero perdón.

Mads: Estoy molesta y decepcionada -Bajé mi mirada, sabía perfectamente lo que ella sentía- Eres una idiota... pero así te amo ¡Joder! -Levanté mi mirada confundida-

T/n: Perdón -Ella se acercó a mi y me dio un beso rápido pero con brusquedad- Perdón.

Mads: Deja de disculparte y bésame. -Me tomó completamente por sorpresa, pero ¿Quién soy yo para negarme ante mi pelirroja?-

T/n: Mads... deberíamos hablar -Dije entre besos-

Mads: Créeme, lo último que quiero ahora es hablar -Miraba sus ojos, contenían deseo, enojo y tristeza a la vez-

T/n: ¿Estás segura? -Pregunté dudosa-

Mads: ¿Puedes callarte? No quiero hablar ahora.

T/n: Sabes que luego tendremos que hablar.

Mads: Lo sé, pero ahora dame aunque sea un solo buen recuerdo de San Valentín -Se me rompió el corazón, yo había arruinado todo-

No sabía si era lo correcto, pero en ese momento no podía pensar. La besé, la besé como nunca antes, era una sensación extraña de excitación y culpa a la vez.

Pasó su manos por mi cuello y las enredó en mi cabello juntándome más a ella, mordí su labio inferior provocando que emitiera un pequeño gemido, pensé que me iba a reclamar sin embargo no fue así.

Mis manos se encontraban en su cadera atrayéndola hacia mi hasta el punto de retroceder y caer sentadas en el sillón, ella estaba sobre mi con las piernas enrolladas en mi cintura, entonces aproveché la diferencia de altura para sumergirme en su cuello y empezar a morderlo a mi antojo.

Mads: T/n... -Dijo en un suspiro pesado cuando mordí el punto débil de su cuello-

Una vez que me deshice de su camiseta mis manos pasaron por sus pechos masajeándolos ya que no traía sujetador.

Me tomó del mentón y me besó con brusquedad sintiendo sus dientes clavarse en mis labios, me sobresalté teniendo que tomarla de los muslos para que no se cayera y ella se aferró más a mi cuello.

Mis manos se quedaron en sus muslos acercándome con caricias a su centro, cuando ya estaba lo suficientemente cerca la recosté en sofá quedando encima de ella.