El tiempo pasaba a un ritmo demasiado lento y cruel como para procesar las cosas de una forma positiva.
La vida de Matias había cambiado desde muchos puntos de vista, ahora tenía una popularidad masiva, mucha gente parecía conocerlo y querer algo de él y él siempre estaba dispuesto a alguna foto o incluso, por extraño y antiguo qué le pareciera, firmar autógrafos.
Pero aunque eso no era malo, de hecho, todo lo contrario, él no se sentía nada bien.
hacía semanas que no sabía nada de Enzo, lo había bloqueado de todas partes; y hacía semanas que se había ido de la casa que compartía con Malena, que también tuvo que bloquear porque no dejaba de insistir.
Solo y con el corazón bastante roto, se quedaba en la casa de Juani pues era el único que estaba al tanto de lo que sucedía, y allí pasaba su tiempo, durmiendo en el sillón porque se negaba a dormir en el cuarto que alguna vez compartió con Enzo.
-che amigo ¿no te vas a levantar?-preguntó aquél viernes Juani.ya eran más de las siete de la tarde y Matias, aunque despierto, se negaba a salir del sillón
-no, ¿porque? ¿te molesto?
-no, no...bueno la verdad es que si, quiero limpiar, no te moves de ahí desde que llegaste, hace un mes, llevo los segundos contados-intentó bromear
-él dijo que iba a contar los segundos para volver a verme...
Juani suspiró, no dejaba de escuchar la historia una y otra vez
-boludo no quiero ser cruel con vos pero ¿no pensaste que ya fue?-Mati lo miró con desgano-él seguro se esta cogiendo pibes...-dijo y al darse cuenta de la cara de espanto ajena, se corrigió-¡pibas! por ahí y vos acá llorando
-y bueno ¿que querés que haga?
-que te vayas a bañar que hoy salimos
-que buen chiste
-dale,Matias, terminala, ya está, hoy salimos con Santi
Mati se tapó la cabeza con las almohadas listo para dormir,pero sabiendo que Juani no iba a permitírselo.
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Y asi fue, Juani logró sacarlo del departamento y sentarlo en la mesa de un ruidoso bar dónde los tragos no dejaban de correr.
Santi no sabía que pasaba, no recordaba a Matias tan serio y la cantidad de alcohol que no dejaba de tomar no ayudaba.
-creo que deberías cuidar más al pobre mati, míralo como está-dijo Santi preocupado
-lo estoy vigilando mientras charlo con un chico lindo-respondió Juani que desde hacía semanas no dejaba de coquetearle, de forma cada vez más directa
-¿quien será el afortunado?
-te puedo dar una pista... tiene ojos claros...
-ese podría ser cualquiera, hay mucha gente de ojos claros dándose vueltas por acá
-pero ninguno es más lindo que vos
-¿crees que soy lindo? esa no me la esperaba
-te pusiste un poquito colorado, sos re tierno
-es un delirio porque yo estoy normal
-hacete el boludo nomas
-¿te puedo invitar el próximo trago?-preguntó Santi que aunque no lo dijera sentía lo mismo por él
-¿me estás queriendo levantar? mira que no soy tan fácil eh
-poneme a prueba rulitos
Matias los escuchaba y se sentía asqueado, no podía dejar de sentirse de más
