𝙎𝙚𝙩𝙥 𝙙𝙚𝙨 𝙢𝙤𝙢𝙚𝙣𝙩𝙨 𝙞𝙣𝙤𝙪𝙗𝙡𝙞𝙖𝙗𝙡𝙚𝙨, 𝙥𝙤𝙪𝙧 𝙘𝙝𝙖𝙘𝙪𝙣 𝙙𝙚 𝙣𝙤𝙨 𝙩𝙧𝙤𝙞𝙨 𝙥𝙧𝙤𝙩𝙖𝙜𝙤𝙣𝙞𝙨𝙩es.
( Siete momentos inolvidables para cada uno de nuestros tres protagonistas. )
Son más de 7. Eso es claro.
୧ ‧₊˚ 🌑☀️🪐⋅♡
...
Nuestros dos protagonistas estaban en un momento bastante incómodo, bueno, solo para el azabache.
¿Les doy contexto?, y no, no me la trago sin pretexto.
Juan de 10 años, se le ocurrió la maravillosa idea de declararsele a su crush, llamado Iván, de 15 años. Su amigo, Robleis, y Rodrigo un año menos que los dos antes mencionados, solo se reían de la escena, el híbrido se quedaba estático tratando de asimilar todo, mientras, Roier, trataba de sacar a su amigo de cabello castaño de ahí, no quería que hicieran más el ridículo, sería muy extrovertido pero no, esto es dar vergüenza ajena.
- Lo siento, Juan.., no puedo corresponderte, sos muy chico para mí.- La cara del menor paso de una sonrisa a estar completamente triste. Sus mejillas regordetas abultadas se hicieron hacia abajo, su mirada fija en el piso y la rosa que estaba apunto de darle siendo apretada por el puño de esté. - ¿P-por que?- Habló con dificultad del de Gafas, sus lágrimas querían salir pero él las obligaba a quedarse ahí, no quería que el amor de su vida lo viera llorar, sus amigos dicen que cuando llora se ve feo.
- Juan.., primero, ya tengo una pareja y segundo, simplemente no me gust- Iván fue interrumpido por su mejor amigo y casi hermano Rodrigo, este tapándole la boca al azabache, hablando. - Entende nené, sos un esperma aún, ya, shu, andate.- El híbrido, al darse cuenta de las palabras de su amigo rápidamente lo miro con enfadó, tratando de hablar, pero le fue imposible cuando vió al de Gafas correr, limpiando sus ojos llorosos, dejando la flor, rosa rosa, en el piso enlodado del campo, siendo perseguido por su amigo de sudadera de spider-man.
- Sos un hijo de puta, Rodrigo.-
- Hijo de puta el nené que acaba de irse, quería arruinar mi shipp Mayichi x Iván, y eso nunca.-
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
- 8 años después..-
18, 23.
Juan estaba trabajando de cajero y mesero en su nuevo trabajo, en Mc Donald's. Estudia diseño, así que no me queda más opción que trabajar en un establecimiento, de salario mínimo, pero de buena calidad, van muchos clientes. El era el encargado de meserear, llevar pedidos y cobrar, un mesero promedió.
De hecho pensó se meterse de prosti, pero, digamos que eso no le favorecería a su familia católica más adelanté.
No es que la vida le haya sonreído al 100%, ya que la carrera que ha estado estudiando apenas y le da para poder pagarla, así que debe estar de tiempo parcial en un trabajo de medio tiempo.
Sábado por la noche, momento perfecto para ir con tus amigos a cualquier lugar y disfrutar su compañía, la comida, las bebidas, o las tres cosas en una. Spreen no era la excepción. Fue con sus amigos de la secundaria, Carre, su mejor amigo casi hermano, Mayichi, su ex novia pero ahora medio amiga, Cris y Aro, la pareja poli amorosa de Mayichi, Robleis, su amigo, y Betra, su buen amigo y compañero de venta de drogas.
Si.., un poco loco.
Iban a un restaurante para pasar la noche, y como no querían uno tan elevado, pues decidieron ir a un simplemente Mcdonald's, simplemente y bueno.
Entraron, y vieron todo el lugar, sentándose en una mesa de 7. Un mesero llamado "Roier", les llevo la carta del menú, y ahí eligieron varias cosas.
Todo estaba regularmente bien, hasta que un castaño de anteojos, y bandana roja llegó a antenderlos con su voz angelical y encantamiento.
- Muy buenas tardes, espero su estancia aquí este siendo agradable. ¿Ya saben lo que van a ordenar?-
Esa vo.., esa voz a Spreen se le hizo reconocida, algo que hizo que elevará la vista y viese a un ángel en persona. Piel pálida, gafas medio caídas, cabello desordenado color castaño, ojos color esmeralda, y voz que te hopnotiza apenas lo oyes.
Tan bien..
Las miradas de Juan y Spreen se encontraron, y estás solo se vieron, una con confusión, y otra con lujuria, pero a la vez, algo raro.
- ¡A mí me daría una hamburguesa sencilla, y papas medianas por favor!-
El silencio fue roto por la voz de Mayichi, pidiendo su orden. Todos pidieron la suya, y solo quedaba Spreen.., y eso es raro.
- Me daría.., una hamburguesa sencilla y unas papas chicas por favor, al igual que.., un helado de vainilla.-
Juan sonrió con amabilidad y lo anotó en la libreta de pedidos, mientras veía a sus clientes. Y a uno que se le hace bastante conocido..
Hace tiempo que lo miro pero nunca había lucido tan bien.
- Bien, su pedido estará listo en un momento.-
Las miradas de Spreen y Juan se encontraron nuevamente comiéndose con la mirada y desnudandose con los labios. Los recuerdos de la infancia los carcomian y los momentos pasados trataba de absorberlos para que ellos volvieran a encontrarse, pero esta vez, no solo como un amor de niños. ¿Acaso ese chico es el mismo nene de 10 años que le pidió ser su pareja?, wow..
Eso sí, Spreen tenía algo claro. Hará lo que sea para conseguir a ese chico, hará lo que sea para que sea suyo aunque sea solo por una noche. Hará lo que sea para que sus labios toquen los suyos, sus pieles se junten y el único sonido que haya sea el de sus pieles chocando. Hará que sus labios estén tan rotos de tanto morderse que pedirá tiempo.
Y todo eso, lo hará para que el sea suyo, por qué.., es un ángel en persona. Y el quiere que ese ángel sea para él.
Antes de que Juan se fuera, Spreen lo llamo haciendo que el castaño volteaste y acatará el mandato de Spreen. Aún parece que lo tiene en la palma de su mano. Spreen le dió una tarjeta, mientras se acercaba a su oído, susurrando.. - Toma, Juan Cubito.., llámame."-
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
¿Por qué se ve tan bien?
- 1001 palabras.-
Capìtulo 3, no es sexoso, ni triste, felicitenme, y.., no pude subir nada, por que mi celular murió por casi 1 mes.
Felicitenme o en el siguente capitulo lloran todos.
