°CAPÍTULO 13° FLORECIENDO DE NUEVO

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La preciosa reina Melanie se encuentra paseando por los hermosos jardines de aquel castillo, ella lleva su vestido chino de siempre, su cabello parte suelto y recogido en una pequeña moña con palillos chinos, lleva su abanico en mano y su paso sereno; Admirando aquel bello paisaje y sintiéndose libre, al fin lejos de su caótico matrimonio con Damián, sus hijos tranquilos y sin verla en tal condición despreciable, pero es consciente de que aún no es del todo libre, ella hace tiempo no lo ama y siente por él apenas más que desprecio y un terrible rencor, ni siquiera por ser el padre de sus hijos ya era capaz de sentir aunque un poco de aprecio por el.


Tales pensamientos se esfuman del profundo mar de pensamientos que es la mente de Melanie, al oír como una voz extremadamente varonil y conocida llama a su nombre, Melanie se gira serena y se encuentra con el peli marrón trenzado que lleva un parche en su ojo izquierdo, el capitán Pip Bernadotte, quien ahora sirve a ella como guardaespaldas personal, Melanie sonrojada le da una sonrisa cálida


—Capitán Bernadotte -. Dice con un tono sutil en su voz

—Mi reina -. Respondió él, su sonrojo es más que evidente, siempre se pone así al verla, pero él al notar aquel sol tan ardiente que parece estar quemando a Melanie, saca una sombrilla y la abre por sobre la cabeza de Melanie, protegiéndola del sol .— parfait, ma reine (Perfecto, mi reina)

—Merci Capitaine (Gracias, capitán)-. Pip abrió sus ojos, o bueno... su ojo al escuchar a Melanie hablarle en ese precioso francés

—¿Habla usted francés mi reina?

—Un poco, o bueno, en realidad me gradué de lenguas extranjeras 

—Pues bueno, quiero saber más de usted, si no es molestia claro

-. Melanie ríe ante esto .—¿Qué podría contarle yo de mi, Capitán?

—Por el momento de usted se muy poco, solo se que es pelirroja, inglesa, increíblemente hermosa y sabe francés

-. Melanie ríe una vez más, de una manera muy sutil .—De hecho no soy inglesa

—¿Lo ve? Ahora sé una cosa menos, por favor deme el privilegio de saber todo


Melanie sonríe ante Pip sintiéndose halagada por el, pues su tono de voz y su insistente interés en conocerla, realmente jamás se había sentido así, pues su autoimpuesto silencio siempre le prohibió hablar de sí misma con alguien que no fuese Damián, además este hombre le inspiraba la confianza que tanto ha anhelado siempre, así que necesitando de alguien que se interese en ella, empieza a dejar salir sus palabras con una dulce voz, expresando todo de sí.


—Disculpe, capitán por mi egoísmo, me la he pasado enfocada hablando de mi misma

—No, mi reina ¿Puedo pedirle otro favor?

—Claro ¿Porque no? Usted acaba de escucharme hablar de mi por al menos una hora, le concedería todo lo que quiera pedirme en este momento

—¿Puedo llamarla "Fénix"?

—¿Porque fénix?

—Porque es pelirroja, hermosa y por lo que me ha contado, siempre renace de las cenizas, como una imponente y majestuosa ave que se alza por sobre las llamas, extendiendo su belleza y poder

—V...vaya -. Melanie agacha la cabeza y ríe sonrojada, pues nadie jamás le había dado sobrenombre tal que, sonara tan hermoso y divino, pensando en ella y sus cualidades en las cuales jamás ha pensado como tan valiosas para ser nombrada majestuosa por ellas .—Pues si, claro, me encanta, g...gracias

—Por usted todo, mi fénix


Melanie sonríe y Pip le da igual una sonrisa, empezando a acercarse, sintiendo sus respiraciones y pronto rozando sus labios, fundiéndose en un apasionado beso.

SILENCIO DE REINA [LIBRO 2]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora