Mis párpados se sienten
pesados y dolorosos,
al abrirlos cada mañana,
aún más, cuando mi mente
se niega a cooperar
con sus pensamientos angustiantes.Se supone que debo tener control
sobre mis pensamientos,
pero ellos tiran de los hilos
cada vez que despierto.No me queda fuerza
para lidiar con mi mente,
ni para cargar con este cuerpo,
un cuerpo vacío lleno de perjuicios,
ni con un alma destrozada.Mis párpados me arrastran hacia abajo,
y no me queda fuerza.
Solo quiero descansar,
y olvidar todo.