EL INNOMBRABLE - minimoni -yoonmin

#2

Había pasado Ya un año, un año donde Kim NamJoon le mandaba textos a Park jimin, y este siempre le contestaba de manera amigable.

Tenían por lo menos un encuentro por mes, rara forma de terminar con una relación ¿verdad?

Jimin no se iba a mentir a sí mismo, aunque de verdad trataba de hacerlo, su corazón latía desenfrenado cada vez que recibía un mensaje de su ex Alfa.

Estaba claro de que siempre iba a mover algo en su interior, o igual en su cuerpo.

Kim NamJoon era un Alfa demasiado atractivo, media 1.81, su piel era color canela, demasiado hermosa, sí qué sabía balancearse entre su cuerpo musculoso, y su sonrisa tierna de hoyuelos marcados, su pecho era fuerte y fornido, ni hablar de esos gruesos muslos.

El Alfa estaba completamente en forma, lo había visto una vez cuando había ido al mercado, NamJoon iba manejando su Ram del año.

No entendía por qué el alfa tenía una fijación por las camionetas gigantes.

Jimin había entrado a trabajar a un nuevo lugar, compañeros de trabajo diferentes, con los cuales se había acoplado demasiado rápido.

A los tres meses de estar en la empresa, lo invitaban a salir, y de vez en cuando el Omega aceptaba.

Al parecer el Omega estaba marcado, por su pasado con Kim NamJoon, muy raramente otro Alfa o beta se le acercaba, siempre le preguntaban si había estado en una relación con Kim NamJoon, y cuando él decía que sí, lo único que le decían era... "No le digas que te hable", y huyen como locos.

Esa noche estaba en casa de uno de los empleados de la empresa, se reunían a beber y comer chucherías, cantaban en el karaoke unas cuantas canciones y se emborrachaban.

Alguien se sentó al lado de Jimin mientras este observaba como dos de sus compañeras se peleaban por el micrófono, los otros cuatro estaban comiendo seguramente para no caer rápidamente por el alcohol.

-¿Estás incómodo en este ambiente?- preguntó El alfa que se había acercado a Jimin.

Jimín giró su cabeza para ver al Alfa pelinegro frente a él, era demasiado atractivo, su piel era demasiado pálida, los ojos eran rasgados, y rápidamente Jimim lo asoció como un gatito.

Claro que lo había visto antes en la empresa era un alfa muy atractivo, recuerda haberle preguntado a una de sus compañeras por su nombre, se llama Min Yoongi.

Al parecer El hijo del dueño de la empresa, alguien muy importante, y había escuchado que tenía un temperamento demasiado fuerte.

Jimin asociaba temperamento fuerte, con hombre atractivo, no lo juzguen, le gustaban los hombres malos, de fuertes temperamentos, y que lo trataran como rey, no pedía mucho.

-el ambiente está bien para mí- le contesto el Omega rubio sonriendo al Alfa pelinegro a su lado, quien rápidamente le regresó la sonrisa.

-si te sientes incómodo, Yo podría llevarte a tu casa a la hora que tú quieras- se ofreció amablemente.

La verdad, Jimin no supo interpretar su invitación, ¿sería que le estaba echando los perros?

A sus 24 años, no podía descifrar bien si le estaban echando los perros, o de verdad estaban siendo amables, porque eran amables.

La verdad los alfas eran demasiado confusos, a su mente vino la imagen de NamJoon, y sonrío un poco a recordarlo, le habían dicho que por ahí cerca vivía su actual novia.

Ahora su ex, el INNOMBRABLE, tenía una nueva relación, y para qué se iba a hacer tonto, le dolía, Pero nunca lo iba a aceptar en voz alta.

Pero Jimin, era alguien que aceptaba sus actos, él ya había dejado a su grandote, y solo restaba seguir con su vida, aún era muy joven.

-¿Te gustaría comer conmigo mañana?- escuchó de repente la voz ronca del Alfa junto a él.

Jimin no iba a desaprovechar el poder comer con ese atractivo alfa,
A quién iba a engañar, le atrajo desde la primera vez que lo vio, pero al ser el hijo del dueño de la empresa, no pensó que podría fijarse en él, claro, todo era protocolo de la empresa.

Ya sabía que los ricos tenían cosas raras, entre ellos mismos.

-¡claro!, me gustaría mucho- le respondió, y sonrío abiertamente.

Yoongi le dio un trago a su bebida, sabía si decir lo dé a continuación o debía callarlo, pero la verdad era que el Omega le gustaba demasiado.

-¿tú ya no sigues de novio con ese Alfa?- preguntó el alfa peli negro, para después darle un sorbo a su cerveza, por la mirada que Jimin le había dado.

Para Jimin era demasiado bueno para ser cierto, sabía que los alfas no se le acercaban porque tenía el miedo de NamJoon, y si era demasiado bueno para ser cierto que ese Alfa se le hubiera acercado sin tener miedo de su ex, El INNOMBRABLE.