drink Poison from the wrong lips ✔

Chapter 2; Haven't you heard the rumours?

Chapter 02;
"Haven't you heard the rumours?"
(Rumor Has It - Adele)

La ceremonia para el anuncio del premio Plnth había sido una total perdida de tiempo, sobre todo, porqué no habían dado información relevante al respecto más que una pequeña insinuación sobre un nuevo requisito para ganarlo.

¿Cómo cuál? ¿Ser la amante secreta del heredero Plinth?

Coriolanus sentía que estaba a punto de perder un ojo del estrés.
No podía dejar de ver pequeños y secretos toques entre Sejanus y Arachne que le arrancaban un odio profundo desde algún sitió que él antes no conocía.

No podía creer que una chica que había hecho trampa fuera a ganarle el premio que el tanto necesitaba. Era injusto, y no podía decírselo a nadie. 
Aunque se moría de ganas de gritarles en la cara que lo sabia todo.

¿Y si usaba eso a su favor? 
Lo analizó por unos instantes, pero, concluyó que sería ridículo. Después de todo, el del premio era Sejanus, y él seguro no tendría problemas en que supieran de lo suyo con Arachne, pero ella seguro que sí.

Podía decirle que se alejará. Aunque no tenía pruebas.
Estaba en desventaja.

Una vez que por fin pudieron ponerse de pie, él se quedó intercambiando charlas superficiales con algunas personas mientras los demás se marchaban a casa. Respondía preguntas en piloto automático mientras, para su molestia, no podía quitar sus ojos de Sejanus y su familia.
Necesitaba información ahora o la incertidumbre lo volvería loco.

Aunque toda su vida había rehuido a que lo relacionaran con el chico de los distritos, decidió que hoy tenía que dejar eso de lado. Era de suma importancia hacerse con un lugar y defenderlo con todo lo que tuviera.

Se acercó disimuladamente a su entorno hasta que Sejanus reparó en él y tomó la iniciativa de acercarse con una mujer de estatura menor colgando de su brazo. No necesitaba presentaciones, su aspecto lo decía todo de ella. Traía un elegante vestido con estampado de flores, caro, eso estaba claro, pero, todo lo demás gritaba su origen sin que ella lo comentará primero.
Aunque la mona se vista de seda, mona se queda —pensó para sus adentros.

Y les sonrió cuándo ambos ya estaban suficientemente cerca.

—Coriolanus —soltó Sejanus, tomándolo por sorpresa realmente.

Habría esperando que le soltara ese apodo que él tanto odiaba que le pronunciará.

—Sejanus —contra atacó.
—Déjame presentarte a mi Ma —sonrió de verdad—, Ma, él es Coriolanus Snow. 
—Señora Plinth, que honor.
—Querido —recibió su mano con una sonrisa tímida. Se parecía mucho a su hijo—, es un gusto por fin conocerte. Sejanus ha hablado mucho de ti. Y bueno, también el consejo —acepto—, veo porqué tienes este lugar.

Su lugar entre los 24 mejores estudiantes de la academia había sido ganado con esfuerzo, la verdad es que siempre se ponía orgulloso cuándo alguien se lo mencionaba. A pesar de las reales razones tras él (la desesperada situación de su familia), a él le gustaba que le recordaran que era uno de los mejores, como si no se esforzará en absoluto por serlo. 

—Oh, muchas gracias.
—No, somos nosotros los que tenemos que agradecerte a ti. Estamos tan contentos de que Sejanus tenga un amigo como tú. Si alguna vez necesitas alguna cosa, espero que sepas que puedes contar con nosotros.
—Bueno, lo mismo digo señora. Me tienen a su servicio.

La señora Plinth pareció conmoverse hasta las lágrimas ante su respuesta, y rápidamente, buscó en su cartera para sacar un pañuelo con el que se enjuago las lágrimas.