18.

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Jongho dejo escapar un jadeo cuando sintió las feromonas de excitación de Yunho. La habitación se sentía caliente, era como un infierno. Un excitante infierno en el cual el omega quería quemarse.

Jongho se apoyó contra la puerta cuando vio los rojos ojos de Yunho. Definitivamente su novio estaba fuera de sí. Su alfa estaba tomándolo por completo total.

- Omega- la voz de mando del alfa provocó que Jongho soltara un bajito gemido mientras se apoyaba mucho más a la puerta, como si está fuera su única salvación para evitar que su omega tomará posesión de su cuerpo.

- Yunnie- exclamó Jongho con la voz ahogada. Y con cuidado camino hacia el alfa que se removía en la cama tratando de soltarse de las gruesas correas de cuero que lo sujetaban a esta- Yunho, cálmate- un gruñido fue lo que recibió.

- Alfa, sólo Alfa- dijo de forma grave Yunho cosa que asustó un poco a Jongho.

- A-Alfa...cálmate por favor- el mayor lo miró de forma inmediata y soltó un gemido al sentir las dulces feromonas del omega.

- Omega, te necesito- Jongho solo pudo morder su labio de forma nerviosa.

Lo pensó una y otra vez, y sin más se acercó a los amarres que sujetaban a Yunho.

Uno a uno lo soltó empezando por el de los pies, luego soltó el que sostenía la mano derecha del alfa. Y cuando soltó el de la mano izquierda, pronto se vio apresado por el alfa que se restregaba contra él.

- Omega... mi omega- Jongho no pudo responder debido al beso que el contrario le robó.

Era un beso desordenado, lujurioso, y el omega se separó soltando un gemido, pero el alfa no le dio tregua en cambio sujetó al menor por los rellenitos muslos de este para alzarlo. Por inercia Jongho rodeo las caderas de Yunho con sus piernas.

No sabía que Yunho tenía tanta fuerza.

El alfa volvió a besar al omega que se sostuvo de los hombros del alfa que apoyo el delgado y pequeño cuerpo del omega contra la pared.

La fría pared creaba un gran contraste con la piel de Yunho, la cual se sentía caliente.

Jongho soltó un leve chillido cuando los labios de Yunho dejaron los suyos, para bajar por su cuello, dejando pequeñas mordidas y chupetones en este.

- ¡Alfa!- casi gritó el menor cuando el contrario apartó o más dicho arrancó la camiseta que el omega llevaba, convirtiendo está en simples trozos rotos de tela.

Al mayor no le importó el reclamo de su novio y aún sosteniendo al chico de las caderas bajó para pasar su lengua por el pezón derecho del menor, que aún a pesar de la incomoda posición se retorció al sentir una descarga de placer recorriendo su cuerpo.

Jamás se había tocado así. En sus celos se la pasaba llorando y durmiendo así que el libido sexual en verdad casi ni le importaba.

El alfa se apartó para ver la expresión de placer del rostro de su omega. Jongho jadeó cuando fue dejado de forma brusca en la cama. Aún con los ojos entrecerrados observó el rostro de Yunho, el cabello del mayor se pegaba a su frente, y su mirada carmesí escaneaba el lascivo rostro de Jongho.

La erección de Yunho era muy palpable a través de su ropa, y Jongho jadeó cuando el contrario empezó a frotarse contra él, buscando aliviar aquella molesta y ardiente excitación que sentía.

Choi gimió de forma alta cuando el mayor empezó a mordisquear sus pezones, los cuales eran un punto erógeno en cualquier omega.

[...]

¡Desvergonzado! [2ho]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora