Nuevo cuerpo, destino incierto

La estrella sobre el horizonte

Capturamos a todos los que estaban bajo el mando de Frollo, personas que se enriquecían a costa de otros.

A él quise hacer su muerte dolorosa y humillante, así que al igual que como sería tratada una bruja en mi mundo, lo atamos a un poste alrededor de leña para la hoguera.

Si se creía alguien capaz de juzgar como un dios hacia los "pecadores" entonces debe irse como su creencia lo indica, ya que él es un pecador.

Grito y grito, pero nadie le dio compasión, los aldeanos celebraron cuando no quedaba nada de él, es como si se hubiesen quitado grilletes de sus manos y pies.

Hyoga y Varian estaban en una habitación dentro de la mansión de Frollo, el chico aún estaba dormido, pero Hyoga no se quiso separar de él aún cuando le asegure que él estaría bien.

Pero puedo entenderlo, si mi bebé no despertara no dejaría su lado por nada del mundo.

En cuanto a los soldados restantes, bien...

Aún cuando quisiese deshacerme de cualquiera que pueda ser un posible traidor, debo de admitir que no tengo un ejército de fuerza de ataque si nos llegasen a atacar, Hyoga y yo no seremos suficientes con solo lanzar fuego y hielo a diestra y siniestra. Puede que enemigos tengan en sus filas a magos de contrabando (puesto que por ley todos aquellos con poder mágico están obligados a solo servir a los emperadores) o no supongamos una amenaza si reconocen nuestra debilidad de números y experiencia.

Con eso en mente los agrupe a todos ellos, más de 70 soldados, juntos y para evitar que intenten algo traje al dragón conmigo, una criatura sumamente obediente y muy amorosa.

Hacia conmigo mostraba grandes ojos con pupilas dilatadas iguales a un gato, sonreía para mostrar que no tenía dientes, pero con solo acercárseme alguien más de metro y medio su semblante cambiaba a amenazante.

Era muy largo y más alto que cualquier hombre, casi llegando a los 10 metros y medio, eso le ayudó a su apariencia atemorizante.

-Veo que ustedes no son dignos de llamarse soldados, han hecho un juramento hacia la justicia del pueblo que rompieron, ayudaron a alguien que esclaviza y daña a seres inocentes como niños y jóvenes. Puede que no tuvieran opción, o lo hicieron por temas personales. Investigue a la mayoría de ustedes, chicos y hombres que entraron a las filas de Frollo bajo amenaza o por necesidad para ayudar a su familia, y lo respeto. Pero ahora yo estoy a cargo, como tal les ofrezco una elección, arrodíllense y únanse a mí en mi travesía hacia un reino nuevo donde les ofrezco protección y una mejor vida, o acompañen a su señor Frollo al infierno- una elección, vida o muerte-.

Todos aquellos de los que me consta fueron obligados, se arrodillaron sin pensarlo, por desgracia solo fue un poco más de la mitad.

Algunos chicos mostraban indecisión, probablemente que eligieron "el lado ganador" pero al final no fue así, tal vez en búsqueda de riquezas u honor. Puesto que la ley de caballeros estipula que solo debes obedecer a alguien toda tu vida, tu lealtad será eterna para con solo un individuo.

'Chimuelo' se dio cuenta de que mi expresión se ensombrecía, así que gruñó fuerte y claro. Más y más comenzaron a arrodillarse.

Solo algunos hombres todavía quedaron de pie.

-Me conmuevo por tal lealtad hacia alguien tan profano, ¿están seguros de seguir ese camino?-pregunté con calma-.

-No hay desiciones fáciles, pero como usted dijo, el código de caballero dicta que se es leal solo a un individuo por siempre. ¿Por qué me arrodillaría ante una mujer gitana? Eso solo es escupir hacia la alta cuna como lo son sus majestades los emperadores, puede decir lo que quiera, pero Sir Frollo era un aristócrata y parte de este reino, usted es solo una intrusa- el hombre con canas y con heridas por todo su cuerpo, no flaqueo y dijo con orgullo-.