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"Eres mía, maldita mocosa"

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"Eres mía, maldita mocosa"

Camille

—¿Q-Que?—Lo mire nerviosa. ¿Acaso nos habrá visto?, pero que estúpida, era más que obvio

—Te acabo de ver, bajando de su auto. ¿Que carajos hacías con el?—Su toque se fue profundizando causandome dolor

—T-Tom me estás lastimando—Mire su mano y a esta se le notaban las venas

—¡Contesta Camille!—Me acercó a el tomándome por el cuello, para después pegarme a la pared

—N-Nada, solo dimos un paseo—Mire sus ojos oscuros, por el momento

—Mas te vale. Eres mía maldita, mocosa, no te quiero volver a ver con el. ¿Escuchaste, pequeña estúpida?—Su mano bajo a mi cintura pegándome a su pecho

—Si..—Dije asombrada por su actitud. Pero sentí un fuerte golpe en la mejilla

—¿Si que?—Acerco sus labios a los míos levemente. Sonara loco pero está parte de Tom me excitaba

—Si...Daddy—Lo mire con deseo y junto a nuestros labios. Entonces la voz de mi madre nos obligó a separarnos

—¿Camille?—Provenía de la estancia. Tom se marchó por detrás de las escaleras y yo camine hacia ella—¿Todo bien, cariño?—Acaricio mi mejilla

—Si, acabo de llevar. ¿Puedo irme a mi habitación?—Dije mirando el suelo evitando que me vea sonrojada por la excitación

—Si por supuesto—Me dio un beso en la frente, le sonreí y subí las escaleras

Me adentre en mi habitación, cerrando la puerta detrás de mi. Estaba por aventarme en mi cama pero unas manos me tomaron por la cintura.

—Ahora sabrás a quien le perteneces y dónde hagas ruido te ganarás un buen castigo—Me susurro al oído, causandome un escalofrío

Me güiro obligandome a verlo, mis manos fueron a su cuello pero el las alejo. Lo mire confundida y el me tiro a la cama.

—Este será tu castigo, pequeña—Se coloco encima mío, sin aplastarme y me ato las manos con una de sus corbatas

—T-Tom, mi madre está afuera—Dije nerviosa mientras el termina de amarrar mis manos

—Eso lo hace aún más excitante—Dejo mis manos arriba de mi cabeza y me miro—Callate—Dijo con voz ronca

Asentí y mire sus acciones atentamente. Tomo el filo de mi vestido y lo quito lentamente hasta dejarme en ropa interior.

—¿¡Lenceria!?—Alzo una ceja, divertido

𝗢𝗻𝗲 𝗢𝗳 𝗧𝗵𝗲 𝗚𝗶𝗿𝗹𝘀; 𝗧𝗼𝗺 𝗞𝗮𝘂𝗹𝗶𝘁𝘇 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora