Entramos al restaurante y vi que Julio quería juntar su mano con la mía, ¿qué significa eso? Le di la mano y vi que se puso nervioso, ¿será que le gusto? Nah, no creo, solo nos conocemos de hace un par de horas. Nos sentamos en una mesa, cara a cara, viéndole a los ojos, me puse nerviosa, ósea, un chico me había invitado a comer con él, a ver, he tenido varias relaciones, pero no fueron cosas serias, algunas ni nos llegamos a besar. — Bueno, ¿qué vas a pedir para comer? — Preguntó Julio— Eh, no sé, hay mucha variedad.— Oh, ¿quieres recomendaciones? — Vale— Mira, a mí me gusta mucho la lasaña que hacen en este restaurante, o también está muy bueno el sushi que hacen.— Era un restaurante que tenía varias comidas de diferentes países, tenía muy buena pinta.— Ala, a mí me gusta mucho la lasaña, pediré eso.— Que bien. Es de mis favoritas — Dijo con una sonrisa— Y bueno... ¿Tienes no- — Vino la camarera interrumpiendo nuestra conversación. No sé qué me iba a preguntar, pero no me lo dijo en toda la comida. Supongo que se lo habrá pensado otra vez.— Hola, ¿qué os puedo servir? — Dijo la camarera— Mmm, para mí una lasaña — Y para mí otra lasaña— Vale, ¿queréis algo más?— Ah, sí, una botella de agua y una ensalada césar — Dijo con una sonrisaDios, este chico es perfecto, le gusta la ensalada. A todos los chicos de mi clase no les gustaba nada de verdura, comían comida basura, eso les hacía menos atractivos.— De acuerdo, en unos minutos os traeremos la comidaLa camarera se fue y Julio me miró, yo también le miré, sentí otra vez esa sensación, pero diferente, era más fuerte. ¿Me he enamorado? Nah, no creo.— Y bueno, ¿de qué quieres trabajar?— Ah, pues, de momento voy a acabar el bachillerato de ciencias de salud y luego ya creo que iré a psicología.— Oh, yo también quiero ser psicólogo, y también estoy estudiando bachillerato de ciencias de salud — Dijo sorprendido— Pues a lo mejor nos toca en la misma clase — Dijo asegurado— Pues ojalá, no conozco a nadie de la escuela de momento.— Yaa, a ver si nos toca juntosEn ese momento me sonrojé, me gustaba que la gente se preocupara por mí, y más si es un chico.Vino la camarera con las lasañas y la ensalada césar.— Oh, ya ha llegado la comida. — Dijo Julio con una sonrisa.— Siii— Ahora traigo la botella de agua — Dijo la camareraEsperamos a que llegase la camarera— Aquí está, buen provecho. — La camarera miró a Julio al decir eso y le pasó la mano por el brazo.- JODER, ¿le ha pasado la mano por el brazo? ¿Por qué estoy celosa? Puede que sí me guste Julio, pero, ¿QUÉ LE PASA A LA CAMARERA?Hubo un silencio un poco incómodo, no sabía que estaba sintiendo Julio ahora, ¿la camarera estaba ligando con él? A ver, no me extrañaría, Julio es muy guapo, y ya me parece raro que me haya hablado, solo soy una chica básica que tiene gustos musicales diferentes y viste diferente. Pero la camarera ya tiene cara, eh, o sea, ve a un chico y una chica comiendo en un restaurante y dice, va voy a ligar con el chico, ¡PUES NO!— Eh, bueno, vamos a comer. — Dije un poco decepcionadaA ver, él no tenía la culpa de que la camarera ligase con él, pero, no sé.— Sí, que si no se va a enfriar la comida.Empezamos a comer, estaba un poco incómoda, no sé, estaban pasando muchas cosas a la vez.— Y bueno, ¿por qué te has mudado aquí?, si se puede saber.— Dijo Julio en un tono un poco incómodo— Pues, en mi antigua ciudad, vivía con mi madre y mi padre, ahora ya no están juntos, y mi madre no encontraba trabajo en esa ciudad, entonces, nos mudamos aquí.— Oh, ya veo, pues yo creo que esta ciudad te va a gustar, tiene un poco de todo, centros comerciales, playa, skateparks, de todo.— Yaa, a ver, de momento me está gustando, solo que extraño a mis amigos de mi antigua ciudad.Seguimos comiendo y hablando, ya casi se me había olvidado lo de la camarera, hablar con él era muy agradable.Acabamos nuestra comida y vino la camarera a retirar los platos. Otra vez, había ligado con él, le había dicho "Te retiro los platos, guapo". JODER, como venga otra vez a ligar con él, te juro que me va a dar algo. Pero tampoco le quería decir algo, porque no somos nada.Miré a Julio, le vi un poco incómodo. Supongo que a él tampoco le habrá gustado. Hablamos un poco más intentando olvidar eso otra vez, pero volvió a venir la camarera.— ¿Queréis algo de postre? Dijo la camarera mirando a Julio— Eh, ¿servís el velvet cake? Dijo Julio— Si— Pues uno de esos, por favor. ¿Y tú, Pau, quieres algo de postre?— Pues, no sé, otro velvet cake para mí. — Dije algo incómoda— Vale, ahora os lo traigo.La camarera le pasó la mano por el hombro, YA NO AGUANTO MÁS, a la próxima que venga le diré algo.

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Un gran cambio
RomanceUn libro de romance, drama sobre una chica llamada Paula, era bastante popular en su antiguo instituto, se muda a una ciudad muy lejos de donde vive ella. Ella entra a un instituto nuevo, ¿será popular también?