cap 3

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— No entiendo por qué vas a ir...

— Porque me interesa.

— ¿Irás hasta allá?

JiMin miró entre su ropa pensando en qué tipo de playera debería usar. Debía ser algo casual así que probablemente escogería algo de algodón básico para no verse tan trabajado, de cualquier manera aún no sabía a qué destinos lo llevaría el pálido chico, lo cierto es que había sentido interés desde que lo vió protegiéndolo en la fiesta de su padre -que en realidad era de sus empleados-, así que aprovecharía para conocerlo mejor ¿quién sabe? igual resulta en algo interesante. TaeHyung, que usualmente estaba siempre con él, se encontraba en el sillón mirando su celular, probablemente scrolleando en instagram para matar el tiempo pero sin prestarle atención en realidad. Sólo soltaba pucheros sin entender el actuar de su mejor amigo.

— Nos veremos en un punto en común.

— Haz que venga por ti. —TaeHyung suspiró con una risa sin mirarlo.

— ¡No seas grosero! ¡Además...! Él nos trajo esa noche aunque le quedaba lejos.

— Su coche se paró.

JiMin no dijo nada, recordó como esa noche YoonGi se disculpó y en algunas veces bajó para empujar el coche él solo, y aunque pensó en ayudarlo, el pálido se había negado con vergüenza, pero decidió no tomarle tanta importancia, el punto es que el pálido había sido amable.

— Exageras...

— ¡Fueron diez veces!

JiMin miró a su mejor amigo y levantó los hombros ¿qué eran diez veces?

🌮

TaeHyung había decidido llevarlo en su coche hacia esa zona, alegando que "no lo dejaría solo". Cuando atravesaron la periferia de la ciudad suspiró por el tráfico, en un cruce notó al pálido que había quedado con su amigo, llevaba una camisa blanca muy ancha para su cuerpo a la par que los pantalones los presumía con la misma soltura. Estacionó su vehículo no sin antes mirar a su mejor amigo.

— ¿Estás seguro?

— ¡Ash! ¡Ya te dije que sí! —JiMin giró los ojos.

Bajaron del coche, TaeHyung se colocó sus lentes de sol para comenzar a ignorar a YoonGi, que siendo cortés siempre, lo saludó importándole poco que su saludo no fuese correspondido. JiMin, por su lado, acomodó su cabello detrás de su oreja y se portó demasiado "lindo". TaeHyung sintió un escalofrío de vergüenza ajena y sacó su celular para entretenerse.

— ¿Él nos acompañará?

— Ah... —JiMin miró a TaeHyung y negó— sólo quiere ver dónde estaremos, es protector.

YoonGi asintió comprendiendo.

— Bien. Vamos a comer.

Caminaron unas cuadras mientras YoonGi le iba preguntando por su estado de salud. JiMin respondía a cada pregunta encogiéndose entre hombros, TaeHyung miró los alrededores, algunos negocios abriendo tan temprano y algunas familias paseándose dispuestas a ir hacia los tianguis como entretenimiento grupal -o quizás también aprovechar para comer-. Pensó que él se estaría divirtiendo más en la piscina de su casa, pero como se lo había propuesto, no dejaría solo a su amigo. Llegaron a una calle donde había un mercado grande, ambos se sorprendieron de la cantidad de gente que transitaba. Al entrar a la infraestructura se encontraron con una mezcla de colores y olores. Al final de uno de los pasillos -luego de pasar por puestos donde vendían carne, verduras, flores y hasta ropa-, encontraron un sitio que tenía música a un volumen medio, cuyas mesas estaban acomodadas y limpias.

por tu amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora