12. Desperate measures

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Era de noche ya estaban en cama pasando quizás la última vez que dormirían juntas, Barbara creía que lo mejor era por fin hablar de la situación que las apartó, porque una relación con Leigh basada en pretender que eso no sucedió jamás no resultaría.

– ¿Te sientes muy cansada? – Preguntó Barbara en un susurro

– Un poco – Respondió acomodándose mejor de lado viendo el rostro de ella, le gustaba estar entrepiernadas mientras acariciaba su cuerpo, juntó su rostro al de Barbara dejándole un suave beso en los labios

Sonrió tomando a Leigh de la cintura abrazándola a ella, tomó aire preparándose a por fin arreglar lo que había roto – No voy a justificar lo que hice, porque sé que te herí, yo... yo me acostumbré a utilizarme para que los demás hagan lo que yo quiera, no creas que pago con favores sexuales, sólo les doy la esperanza de que podría suceder mientras mejor se comporten conmigo, sé que tal vez sea repulsivo para ti, pero es como siempre me han visto ¿Sabes? Nunca he sido brillante o buena en el trabajo, si no un algo que ver y si tienes suerte algo que puedas tocar, así que lo uso a mi favor, siento mucho que hayas presenciado uno de esos momentos, trataba de buscar una actividad para las dos, insisto que nada de lo que te digo es para justificarme, sólo quiero que lo sepas, tomes mis disculpas y quieras volver conmigo, bueno... empezar

Leigh creía en cada una de sus palabras – Hay otras maneras de conseguir ciertos favores y cosas, entiendo lo que me dices y acepto tus disculpas – Acarició su mejilla – No puedo evitar que muchas personas te vean como una cosa, pero tampoco ayuda si les das ese acercamiento, así que tienes que detener esto, pero no por mí, sino porque eres una persona inigualable, no encuentro cómo describir lo inteligente, hermosa, amorosa, atenta, detallista, sensible... tienes tantas cualidades que resaltan más en ti que tu belleza, y eres extremadamente preciosa, así que imagina cuánto excedes en todo lo demás – Sonrió besando su mejilla repetidas veces – Así que hazlo por ti, porque yo estoy tan enamorada que no quiero apartarme de ti de nuevo

Barbara sonrió del mismo modo tomándola de la cintura para besarla, apretó uno de sus muslos acercándola más a ella mientras sentía esos labios y esa lengua invadirla, por fin todo volvía a su cauce.

– ¿Ya soy tu chica oficialmente? – Preguntó Barbara con emoción entre besos

– Lo eres – Asintió viéndola a los ojos – Mía, eres sólo mía – Suspiró volviendo a tomar su boca en un beso avasallador, mientras acariciaba su cuerpo

Después de unos minutos se separaron un poco respirando agitadamente – Aprovecho para disculparme por lo del retiro de parejas, sé que fue desesperado, pero no quería intentarlo de la manera clásica

– Así sólo haces que caiga más y más contigo – Sonrió volviendo a besarla

Los besos empezaban a escalar de nivel, Leigh se había puesto encima de Barbara, pasando las manos por su cuerpo, apretando sus muslos, su respiración se volvía más pesada, mientras subía su camiseta.

– Bar... – Empezó a besar su cuello – Me pones demasiado... – Subió su top apretando sus pechos sentía la respiración ahogada de su novia, también sus manos recorrerla – Eres demasiado para mi corazón – La tomó del cuello viéndola a los ojos unos segundos para volver a besarla

– Leigh... – Soltó en un suave gemido, sentía su cuerpo igual de deseoso que el de ella – Que preciosa que eres, me haces sentir tan bien... – Pasaba las uñas por su piel mientras correspondía sus besos, sintió la boca de Leigh en uno de sus pechos – Mmmmm... – Nunca habían tenido tanta delicadeza y atención con sus zonas sensibles, agradecía tanto tenerla en su vida, le gustaba la manera en la que succionaba y pasaba su lengua mientras la veía a los ojos

Seductive Games | BarLeighDonde viven las historias. Descúbrelo ahora