Años en guerra, Parte 2: El nacimiento de la Legión -COMPLETO-

Capítulo 48: El Quibbler se reabre

A/N: A:

He recibido una serie de mensajes privados, todos los cuales están preguntando sobre lo mismo: "Dónde están todas las escenas de sexo pornográfico gráfico?" Creo que tengo que volver y reescribir bastantes capítulos para dar a la gente lo que quiere. Por supuesto, esto solo me hace preocuparme, un poco, por las personas que están leyendo mi fanfiction... así que espera que el trabajo disminuya a medida que vuelvo y trato de "escribe porno" de una manera gráfica pero de buen gusto.... No tengo idea de cómo hacer eso....

En una nota completamente separada: Mi más sincero agradecimiento y gratitud a Nachtrae por tomarse el tiempo para leer, editar y comentar sobre este Capítulo. Ella hace un trabajo increíble y tengo la suerte de tenerla como mi beta.

Lo mismo tiene que decirse de mi esposa. Ella lee, comenta y hace agujeros que ayudan a mejorar aún más los capítulos. Está al acecho sobre mi hombro, agitando una computadora portátil con amenazas de reanudar la escritura o ser golpeada...

Capítulo 48

El Quibbler se repite

"Serás la muerte de mí", murmuró en su oído antes de mordisquearle tan suavemente el cuello. Se cortaron las cortinas y la chimenea era más brasas que la llama real. Las sábanas estaban desordenadas y todas las almohadas estaban esparcidas por el piso de madera pulida, excepto por una almohada que ambos compartían de alguna manera.

"Seré tu muerte?" preguntó en voz baja, "Solo soy el mago promedio, no creo que haya un mago vivo que pueda igualar la resistencia de una Veela." Ella parecía brillar con una luz interior y radiante. Estaba seguro de que era el único que podía verlo, "Tengo que admitir que fue interesante,"

"Interesante?" ella se rió, "La mayoría de Veela nunca ha oído hablar de ella, y la mayoría de las mujeres no lo harán, y todo lo que se puede decir es "interesante?"" ella le golpeó el pecho juguetonamente, "Tal vez debería usarlos en ti y ver cuánto lo disfrutas?"

Reconoció ese brillo en sus ojos: El que cruzó la línea entre sexy y malvado. Miró el reloj en la mesita de noche con asombro: ¿Cómo podría ser solo cuatro y tantos por la tarde? El sudor se aferró a ambos, y todo lo que quedaba de la mousse de chocolate eran dos cajas vacías.

"Deberíamos limpiarnos", extendió la mano y dejó que su mano volviera a la cama. Podía sentir el dolor en sus músculos, un buen tipo de dolor. Le tomó más esfuerzo del que debería tener para llegar a la taza y luego drena su contenido. Con un suspiro, sintió que el dolor se iba, "Pero voy a necesitar un serio convencimiento antes de dejarte salir de la cama."

En su mente, repitió lo que había sucedido solo unos minutos antes, enfocando y admirando todos los pequeños detalles: la forma en que había puesto, sobre su espalda, los brazos estirados sobre su cabeza, la forma en que había arrojado la cabeza hacia atrás, exponiendo la piel suave en su cuello, la forma en que sus senos se habían agitado cuando él la había tomado. Se había tomado su tiempo, asegurando su placer antes que el suyo, no porque estuviera tratando de ser un amante considerado, pero más porque en realidad disfrutaba la expresión de su rostro, ya que ella estaba en medio de su placer.

Sintió que algo de fuerza regresaba cuando Fleur se acurrucó contra él y dejó que su mente divagara incluso cuando se dio cuenta de que ella había dado la vuelta para enfrentarlo. Separado como estaba, se dio cuenta de que ella lo estaba mirando, casi estudiándolo. "Mon amour, ¿qué te preocupa?"

Visiblemente comenzó con la intrusión en sus pensamientos. El hecho de que ella pudiera leer sus pensamientos y estado de ánimo, no significaba que lo hiciera en cada oportunidad. Todo el mundo necesita privacidad, especialmente dentro de su propia cabeza. "Me conoces demasiado bien", dijo en voz baja, "Solo estaba pensando.." Le tomó unos largos momentos poner sus pensamientos en orden, "He... matado," comenzó, "Padres, hermanos, tíos, hijos, y sin duda...Hay Mortífagos que son mujeres. Podría tener que matarlos también."