Sinceridad

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Necesito que seas sincero conmigo. ¿Qué me estás ocultando? ¿A qué tienes miedo? ¿Por qué no te abres a mi? ¿No tenemos suficiente confianza ya?. Esas son las preguntas que me hago cuando no eres claro conmigo, sospecho que tienes miedo a perderme y alejarme de tu lado si escucho la verdad. Ya te lo dije una vez, sobre que las personas me ganan y me mantienen a su lado si son sinceras conmigo, no soporto la gente que me oculta su vida cuando me intereso por ellos. Voy tras de ti, siempre, sabes que me tienes ahí, que cuando me hables para vernos sabes que cedo rápido, no me lo pienso y quedo contigo. Sabes que eres una de mis prioridades en esta vida, pero no te importa, no le das la importancia que se necesita. Crees que por decirme realmente lo que piensas de mí, ¿voy a huir?. Lo que creo es que no sientes lo mismo, que no me amas como yo te amo, cosa que me parecería extraña después de los actos y de las palabras que me dijiste hace tiempo. Pongo ejemplos:
-Al acabar de cortar la relación con tu ex me dijiste que nos conocemos desde bien jóvenes y que te gustaría estar juntos, tú y yo. ¿Que hice en ese momento? No darle importancia, estando yo con pareja no iba a responderte que si quiero estar a tu lado, yo sabía que no estaba bien en esa relación pero cada uno debe tomarse su tiempo, decidiste proponerme una relación cuando cortaste con tu pareja, fue muy tarde y muy temprano para mi. Ahora que podemos tener algo, no te expresas con claridad.
-Un día te invité a casa, solo habíamos quedado para mezclar nuestros cuerpos, no te lo pensaste dos veces, ese día olías genial, me encanta tu olor. Pues al ver mi casa al completo me preguntaste: ¿Cómo te gustaría que fuera tu futura casa?. Esa pregunta fue extraña, ¿quieres que vivamos juntos?.
-Otro día diferente dimos un paseo, me preguntaste que dónde quiero vivir en un futuro y te hablé sobre que me quiero ir a Holanda a trabajar. Me dijiste que no me fuera, que viviera contigo en nuestra ciudad, que viviera junto a ti. Ha modo de coqueteo y risas me dijiste que me darías en alquiler una de tus habitaciones de esa futura casa tuya a lo que te respondí entre risas que te alquilaría dos habitaciones, la segunda sería mi taller.
(Quiero llorar ahora mismo)
-Decidí terminar mi relación con mi pareja y te conté lo que ocurrió mientras tomábamos un té. Te dije: estar contigo un ratito me hace muy feliz -y me respondiste;- que bonita eres, me alegro de que hayas tomado por fin la decisión! Te notaba con eso pendiente.
Hablamos sobre tipos de relaciones y en especial la opinión que compartimos y nos sentimos más cómodos: la relación liberal. También dije que llevo 8 años solapando relaciones monógamas y que estoy cansada, a lo que me respondiste que llevas 9 años también solapando relaciones. Nos reímos hablando sobre que tus relaciones duran 3 años y yo te dije que las mías duran 4, curiosa combinación.
Entre todo esto, ¿es posible que te de miedo empezar una relación conmigo?, cuando te dije que estoy cansada de tener relaciones, ¿estás respetando mi opinión? ¿o prefieres estar solo?. ¿Qué fueron de esas palabras sobre vivir juntos?¿Dónde se quedaron?. Te alegraste de que rompiera con mi pareja, ¿porqué ya no estás? ¿ya no te intereso?.
-Me comentaste ilusionado que querías entrenar conmigo para ayudarme en el gimnasio. Tus palabras fueron: Me encantaría vernos congestionados porque nos tendríamos muchas más ganas de comernos... Te afirmé que las palabras se las lleva el viento pero en tu monologo encostraste un día para quedar, un Sábado. Entonces yo te di solución sobre ir un día gratis a mi gimnasio y ahí se quedó, pasan semanas y lo olvidaste, no te importó tanto...
-El día de Nochevieja te dije las palabras que suelen asustar, Te Quiero, pero ¿cuál fue tu reacción?, cogerme de la mano mientras caminábamos sobre el sol cálido hacia nuestras respectivas casas, no quería que ese camino se terminara nunca. No me respondiste con las mismas palabras, pero sí con actos.
-La última vez que quedamos, en mi cumpleaños, volviste a caer en que teníamos conexión, "no es común que me suelte tanto con la gente, vaya palique te he dado. Disfruta lo que te queda de cumple, besos" me dijiste. Caminábamos bajo el sol de invierno, me besaste. Te gusta mi personalidad creativa, como persona sensible me ves firme. Hablando sobre mis creaciones me dijiste "Pírez, es que eres muy sensual".
Ese día llevaba un tatuaje de henna en la mano, me había pintado nuestras runas. Al darte cuenta me llamaste pelota pero más tarde me confirmaste que me llamas pelota al ponerte nervioso cuando te dicen cosas bonitas.

¿Te gusto o no? ¿Qué coño te pasa? No voy a esperarte eternamente. Mis amigas me aconsejan el ojo por ojo, ignorarte al igual que me ignoras tú a mí, no comparto esa filosofía, pero sí que estoy muy enganchada a tu droga y necesito desintoxicarme...
Confirmo el momento en el que me dijiste que eras Veneno, porque me muero de amor, esperándote...

Amar en Pírez revueltosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora