Un Amor Incomprendido. [EDITANDO] (Libro #1 SAGA Desastrosos)

Capitulo catorce

Amber:

Nos besamos con la mayor intensidad del mundo, como si de esto dependieran nuestras, juro que jamas me cansaría de los besos de Nick, este chico sabe como utilizar su boca.

Ambos nos consumimos el uno al otro. Se separa de mi y succiona mi labio inferior y con su pulgar lo acaricia.

Se levanta de la cama y va directo a su baño. Trago saliva.

Voy a tener sexo con un chico que me gusta pero no somos novios, espero no seguir enamorándome luego de esto.

El aparece con un envoltorio plateado, el dichoso condón.

— ¿Lista? — pregunta 

— Eso creo — respondo con dificultad al hablar

Se me vuelve a acercar y sus labios besan los míos nuevamente y van bajando hasta mi cuello, con mis manos atrapo su cabello corto por los lados pero arriba puedo agarrar un poco. Sus dedos toman el dobladillo de mi blusa y desaparece en un abrir y cerrar de ojos. La camisa de el también desaparece y me pierdo en ese cuerpo bien trabajado, coloco mis manos en sus brazos marcados por esas venas que me encantan, toco sus tatuajes que no son muchos pero tiene.

Su dedo toca mi mentón y lo levanta para que lo vuelva a besar.

— Nick — interrumpo el beso

— ¿Qué sucede?

— Soy, soy virgen

—  ¿Qué?— pregunta impresionado 

— ¡Es mentira idiota!— sonrió

— Eres una ridícula — suelta una sonrisa y me besa

Coloco mis manos en el comienzo de su pantalón y lo desabotono con demasiada dificultad. Sus pantalones caen al suelo y puedo ver un enorme bulto en su ropa interior, creo que mañana no podre caminar, Nick es enorme.

Me quita con rapidez mis vaqueros y mis bragas. Besa mis pechos y se quita su bóxer dejando a la vista un enorme y hermoso pene erecto.

Abre el envoltorio del preservativo y se lo coloca, me acuesta y me sonríe tiernamente. Se introduce lentamente en mi interior.

— Nick...—  gimo y me aferro a su musculosa espalda 

Coloca su rostro en el hueco de mi cuello y sus movimientos de cadera son mas fuertes haciendo que su pene me toque profundamente y así causando mis gritos.

Coloca una mano en mi cadera y nos da la vuelta quedando el abajo y ahora yo arriba, apoyo mis manos en su abdomen y las caderas de el no paran de moverse. Creo que estoy en el cielo.

Mis gemidos comienzan a ser mas fuertes al igual que los de el.

Mis piernas comienzan a flaquear anunciando que se aproxima mi orgasmo.

— Vamos nena córrete para mi— gime Nick

Y asi ocurre, estallo en miles de pedazos gracias a este hombre quien también cae al clímax.

Coloca ambas manos en mis mejillas y me acerca a sus labios.

Lunes 7:45 am